No es buena la noticia, tampoco nueva, mucho menos ignorada, aunque inexplicable porque el dinero obtenido por el gobierno estatal a través de recurrentes créditos bancarios tiene destino muy opaco, a juzgar por el propósito que los origina: inversión productiva. ¿Cuál obra pública ha presentado el gobierno estatal qué justifique los miles de millones de pesos presupuestados para 2019, 2020, 2021 y los diferentes créditos bancarios? En la entidad no tenemos a la vista obras de infraestructura carretera, equipamiento urbano, infraestructura hospitalaria, dotación de medicinas, mantenimiento de equipo médico o dotación de servicios públicos que sustenten y hagan constancia de la inversión multimillonaria en Veracruz en estos dos últimos años. De allí, la extrañeza por un nuevo préstamo bancario, este de 2000 millones de pesos. No hay finanzas sanas, eso se sabe, pero urge transparentar la aplicación del recurso público para no entrar en el sospechosismo y al final resulte que a “chuchita” la bolsearon, otra vez.