Después de la CDMX, el Estado de México y Jalisco la entidad veracruzana aporta un gran número de fallecidos en México, lo del semáforo verde endosado a la entidad fue solo un sueño guajiro porque los contagios nunca han disminuido desde el arranque de la crisis sanitaria. Algunos datos nos dan clara idea de una estrategia ausente, reflejada en la ocupación y mortalidad al tope en los hospitales del sector salud en Coatzacoalcos, Poza Rica, Rio Blanco, Xalapa y Veracruz, por citar los de mayor capacidad, también las 22 enfermeras fallecidas en Veracruz y, por supuesto, los 6 mil 334 decesos a causa del covid 19. Ahora, el gobernador convoca a recluirnos, a no socializar, para no aumentar contagios, pero lo hace precisamente cuando pasan las ocasiones del rejuego económico, posadas y demás fiestas decembrinas y a continuación los Reyes, es decir, siguiendo el formato federal, se privilegiaron razones económicas. Una vez concluido el periodo de lúdico gasto se anuncia la posible instalación del semáforo rojo para Xalapa, Veracruz, Poza Rica y Orizaba. Porque la ola crece y la letalidad en Veracruz es bastante elevada.