Sin tacto
Por Sergio González Levet
Otto Granados Roldán, nuestro estimado ex Gobernador de Aguascalientes, ex Embajador de México en Chile y ex Secretario de Educación Pública, nos hizo rememorar ayer, en uno de sus interesantes tuits (@Otto2025):
“¿Recuerdan a Tejero intentando un golpe de Estado el 23-F del 81? En España hubo un Jefe de Estado que lo detuvo. La historia seguirá reconociéndolo, sobre todo en un día tan dramático como el de hoy en Washington.”
Se refiere a Antonio Tejero Molina, el coronel de la Guardia Civil española que al mando de 200 efectivos tomó el Congreso hispano e impidió por un día la toma de posesión de Leopoldo Calvo-Sotelo como Presidente.
El rey Juan Carlos tuvo una intervención decisiva, pues como Jefe del Estado Español condenó el intento de golpe y evitó que Tejero y los suyos recibieran otro tipo de apoyos.
Otto no lo dice, pero deja entrever que en Estados Unidos sucedió ayer un hecho parecido, pues el vicepresidente Mike Pence no secundó el movimiento seguramente promovido por Donald Trump en el que una turba tomó el Congreso norteamericano, con el objetivo de establecer condiciones para que éste no tuviera que entregar el poder dentro de 13 días, como pudo haber sucedido.
Obvio, “Trun”, como le dice nuestro querido presidente López Obrador, entró en cólera y publicó un tuit, cuya traducción al español pongo enseguida:
“Mike Pence no tuvo el valor de hacer lo que debería haberse hecho para proteger nuestro país y nuestra Constitución, dando a los estados la oportunidad de certificar un conjunto de hechos corregidos, no los fraudulentos o inexactos que se les pidió que certificaran previamente. ¡Estados Unidos exige la verdad!”
Los señores de Twitter decidieron una vez más bloquear temporalmente la cuenta del furibundo neoyorquino del peluquín güero, porque incita a la violencia y atenta contra las leyes establecidas.
Son días muy difíciles los que está pasando la democracia yanqui, por los encontrones que le trae “Trun”, quien es evidente que hará hasta lo imposible que le indique su calva y loca cabecita para no tener que dejar el poder, como se lo pidieron más de 70 millones de electores el primer martes de noviembre pasado, que cayó en el día 3.
Aquí lo que causa cierto resquemor es que poco menos de 70 millones de ciudadanos votaron a favor de él, sobre todo los que pertenecen a la mayoría descrita como WASP (White, Anglo-Saxon, Protestant, es decir: blanco, anglosajón y de religión protestante).
En lo personal, no creo que las instituciones gringas -tan consolidadas y fuertes- vayan a permitir que Donald se salga con la suya, pero sí es cierto que el estrambótico millonario va a ser una piedra en el zapato de Joe Biden, con declaraciones diarias en contra de lo que haga como gobernante el demócrata que lo venció.
Días difíciles en el país del norte, con un desquiciado que no quiere dejar el poder…
Y no digo más.