Por lo visto, y está comprobado, en todo el país se ha desatado un acentuado prurito de aplicar la ley, hacer justicia y terminar con la impunidad, pero tiene la curiosa particularidad de aplicarse mayoritariamente a candidatos a cargos de elección popular militantes de la oposición a Morena. Sin duda, nadie podría estar en desacuerdo con el combate a la impunidad, pero sin demérito de las investigaciones del caso, las detenciones de Rogelio Franco (“ultrajes a la autoridad”), Gregorio Gómez, candidato del PRD a la alcaldía de Tihuatlán y ahora de Nicolás Ruiz, precandidato de la trilogía partidista PRI-PAN-PRD en Minatitlán suena a mucha coincidencia. En este último caso, por cierto, quien también aspiraba a la candidatura es la señora Miriam Judith González Sheridan, cuyos inicios morenistas y su metamorfosis política aún son recordados en aquella tierra sureña por el papelazo que desempeñó en 2018 como como candidata al gobierno para golpear durante la campaña a Cuitláhuac García. ¡Cuidado! Porque “los diablos andan sueltos”.