Sigo sosteniendo que Héctor Yunes Landa estará en las boletas del 2024 buscando la gubernatura de Veracruz y eso no tiene vuelta de hoja. De hecho, es el único político seguro en las papeletas. Los demás pueden desbarrancarse porque el camino es largo y sinuoso, pero Héctor no, estará ahí como candidato, aunque no por el PRI. Pero de que va, va.
Héctor volvió a ser noticia al filtrarse un audio donde estaría apoyando la creación del partido Todos por Veracruz y se le escucha decir: “Yo cada vez estoy más seguro, más convencido de que fue un acierto formar Todos por Veracruz, porque es una manera de contención y de mantenernos vigentes y en el más alto nivel competitivo para el 2024”.
Si el audio está editado o no eso vale gorro. Lo que cuenta es que Todos por Veracruz es su plan B para la gubernatura. Un plan al que tendrá que agarrarse porque en el PRI difícilmente le van a dar otra oportunidad.
¿Por qué una afirmación tan terminante? Porque en el tricolor ya no lo ven como una opción para Veracruz. De hecho, nunca lo vieron así, según me han comentado en los últimos tres años priistas de pura cepa.
Desde finales del sexenio de Fidel Herrera, Héctor Yunes fue armando un entramado de alianzas que le dio veinte y las malas a sus oponentes priistas. Cuando Fidel se decantó por Javier Duarte ese entramado se fortaleció al grado que no tuvo problemas para ser electo candidato del tricolor a la gubernatura en 2016. Pero ahí se desinfló.
Sus desencuentros con Javier lo minaron. Uno fue el día del “cañazo” (27 de septiembre del 2015) cuando delante de 10 mil cenecistas Duarte le regaló una caña de pescar y le sugirió que en lugar de pescar a los peces de su administración, pescara a los peces gordos de El Estero, es decir, a su primo hermano Miguel Ángel Yunes y los hijos de éste.
El otro estuvo más perrón. Para marzo del 2016 el presidente Peña Nieto ya no quería saber nada de Javier Duarte y el priismo nacional había marcado su distancia con el mandatario estatal, por lo que a Héctor se le hizo fácil llamarlo la víspera de su toma de protesta para pedirle que no asistiera. “Ok, no voy” contestó Javier.
Pero el día fijado (13 de marzo), tuvieron que ir a la Torre Pelícanos a rogarle que asistiera. Y es que con él estaban los líderes de Pemex, Carlos Romero Deschamps y del SNTE, Juan Nicolás Callejas Arroyo entre otros, que dijeron que si no asistía el gobernador tampoco asistirían ellos ni sus dirigidos. Y era verdad, a esa hora el Word Trade Center estaba más vació que un estadio de futbol por la pandemia.
Duarte lo hizo comer sapos en ese par de ocasiones y al final Héctor perdió la gubernatura frente a Miguel Ángel Yunes con quien terminó peleado quizá para siempre.
Más adelante faltó a su promesa de apoyar a José Francisco Yunes Zorrilla en el 2018 al anunciar que contendería otra vez por la candidatura que al final ganó el peroteño.
Una versión no confirmada pero tampoco desmentida, dice que Héctor fue uno de los responsables de la desbandada de más de medio millón de votos del PRI a los candidatos opositores en detrimento de Pepe Yunes.
Cierto o no, esto es algo que no olvidan los priistas.
Tras la filtración del audio, Héctor se apersonó este domingo en Naolinco para brindar su “apoyo” a Adolfo Mota (un impresentable que debería estar ante un juez de control y no haciendo campaña por una diputación federal) donde dijo: “El PRI es mi origen y destino, por lo que a pesar de las dificultades, nunca he dudado de mi militancia de 42 años. Aquí militaré toda mi vida”.
Temeroso de quedarse en la banca, Héctor está presionando al Comité Ejecutivo Nacional del PRI para que le den la candidatura plurinominal a una diputación local, pero quiere la posición número uno, cuando los priistas desean esa posición para su líder estatal, Marlon Ramírez Marín.
Vamos a suponer que se la dan, lector. Desde la curul buscará (a como dé lugar porque ya es su obsesión) la candidatura a la gubernatura. Y si no lo logra, hasta ahí llegará su amor por el PRI y se pondrá la camiseta del partido que ayudó a crear.
Al hablar sobre el audio, el dirigente de Todos por Veracruz, Jesús Vázquez González, dijo que se trató de “fuego amigo” y responsabilizó al tricolor de la filtración. Pero no se aguantó las ganas de decir que no descartaría en su momento invitar a Héctor Yunes a adherirse a “su” partido si renuncia al PRI.
Reitero lector, Héctor Yunes es el único político seguro en las boletas para el 2024, pero será por Todos por Veracruz y no por el PRI, partido al que políticamente le debe todo lo que es, pero donde simplemente ya no lo quieren.
FGE cierra cerco a joven de RSP
Me comentan lector, que el cerco de una investigación de la Fiscalía General del Estado comienza a cerrarse en torno a Sergio Alcántara Chávez, líder juvenil de Redes Sociales Progresistas en Veracruz.
El joven Alcántara anda lo que le sigue a preocupado ya que es investigado por los presuntos delitos de acoso sexual, coacción y amenazas de muerte. La carpeta de investigación que tiene fecha del 9 de diciembre del 2020, también involucra a dos personas más: Primitivo Cruz Cruz y Vladimir García Soriano.
Me aseguran que dada la naturaleza de los delitos, las autoridades trabajan a marchas forzadas para agilizar su investigación antes de que avance más el proceso electoral.
Lo curioso es que hasta ahora ni el presidente nacional de RSP, Juan Fernando González, ni el líder estatal, Antonio Lagunes Toral, han fijado sus posturas ante tan grave acusación que puede crecer y afectar no sólo a los involucrados sino al propio partido de RSP.
Cero y van tres
Rogelio Franco Castán, Gregorio Gómez y Nicolás Ruiz Roset tienen algo en común, aparte de que un juez los declaró presuntos responsables de varios delitos y se encuentran en prisión. Los tres son miembros de la alianza Va por Veracruz integrada por el PAN, PRI y PRD y los tres tienen (o quizá ya no) amplias posibilidades de triunfo.
Si son culpables o no, eso lo decidirá un juez. Lo maquiavélico del asunto es que a pesar de que las denuncias tenían años en el congelador, hasta ahora se dieron cuenta las autoridades de su existencia, es decir, en pleno proceso electoral.
Sin duda por eso los líderes de esa alianza solicitarán a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, investigue la violación sistemática de los derechos político electorales que se están suscitando en Veracruz por parte del Gobierno del Estado, para posteriormente, pedir que se presente el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, según manifestó el líder estatal del PRI, Marlon Ramírez Marín.
“En vista del clima que se está generando en este estado, analizamos jurídicamente, la posibilidad de acudir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para poner en el contexto lo que está ocurriendo en Veracruz”, indicó Marlon en conferencia de prensa, en la que estuvo presente el líder estatal del PAN Joaquín Guzmán Avilés.
El dirigente priista dijo que luego de la detención de Nicolás Ruiz, candidato de Minatitlán de la alianza Veracruz Va, se denota una acción clara de parte del gobierno, de perseguir a quienes están encabezando esa alianza.
Y no es que uno quiera pensar mal, lector, pero hay candidatos de Morena, PT y PVEM que también tienen denuncias penales por violencia contra las mujeres, por violación o por acoso y nadie les ha tocado un pelo. ¿Qué los hace inmunes, pero sobre todo, qué los hace impunes?