miércoles, abril 24, 2024

La incongruencia del Verde Ecologista

Lo último

No hay democracia sin partido, esa es una verdad incontrastable, aunque algunos de esas organizaciones en los hechos son la irrefutable prueba de abrir espacios para vividores de las prerrogativas. Así parece suceder con el Partido Verde Ecologista de México, una organización que ha sobrevivido gracias a su capacidad camaleónica para cambiar el color de su compañía, pues de rojo pasó a azul y ahora cambió a morado, es la lucha por la sobrevivencia en el presupuesto. Acompaña esa habilidad con su incongruente posición en cada periodo electoral: antes promovía la pena de muerte, nadie hizo eco de esa absurda propuesta; ahora está proponiendo un programa para renovar el parque vehicular del país para fomentar la compra de “autos nuevos y eléctricos”, pues, argumenta, México aparece en el 14 lugar de los 15 países “que más emiten dióxido de carbono en el mundo”. La propuesta la formula sin rubor alguno el coordinador de este inefable partido, Manuel Velasco, quien sufre de repentina amnesia porque el Verde acaba de aprobar la reforma a la ley de energía eléctrica en cuya esencia vibra la pasión por generar el fluido eléctrico con la quema de combustible fósil en demérito de la generación de energías limpias.

Relacionados

Columnistas