Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra habrase
No sé a ti lector, pero a mi cada día me sorprende más la capacidad del doctor Hugo López-Gatell para decir estupideces. Para justificar la incapacidad del gobierno de adquirir medicamentos oncológicos para niños con cáncer, salió con la jalada que los padres de estos niños y la derecha mexicana, estarían preparando todo un entramado para dar un golpe de Estado.
En el programa El Chamuco TV, conducido por el caricaturista Rafael Barajas “El Fisgón”, dijo: “Aquí me gustaría aprovechar para hacer una especie de alerta o por lo menos que quede registrado; este tipo de narrativas de golpe,a veces se ha conectado en la historia de Latinoamérica con golpe de Estado. Y esta idea de los niños con cáncer que no tienen medicamentos, cada vez lo vemos más posicionado como parte de una campaña más allá del país, de los grupos de derecha internacionales, que están buscando crear esta ola de simpatía en la ciudadanía mexicana ya con una visión casi golpista”.
¡Pa-su-me-cha! Vaya manera la de este sujeto de tratar de esconder su incompetencia.
El tipo detalló que cuenta con documentos de grupos del PRI y el PAN donde exfuncionarios y funcionarios, “participaron en el jugoso negocio de la corrupción del abasto de medicamentos en administraciones pasadas (los sexenios de Fox, Calderón y Peña) y hoy están profundamente dolidos porque hemos cambiado la lógica de administración de medicamentos”.
Si tiene esos documentos ¿por qué no los entrega a las autoridades? Una corrupción del tamaño de la que menciona debe ser castigada con todo rigor porque es un atentado contra la salud de más de 100 millones de mexicanos. ¿Por qué no actúa en consecuencia?
Porque no cuenta con esa documentación, de ser así tiene rato que la estaría festinando el gobierno de la 4T en las mañaneras de López Obrador.
La pesadilla de los niños con cáncer comenzó hace dos años cuando empezaron a escasear los medicamentos oncológicos.
Antes de dejar el poder el corrupto de Enrique Peña (o mejor dicho, su gobierno) dejó pagado el stock de medicamentos para los servicios de salud correspondientes al año 2019. Es bueno aclarar que por muy corruptos y ladrones que fueran, ninguno de los gobiernos que antecedieron al actual se metieron con los niños a los que nunca les faltaron sus medicamentos
Pero el gobierno de Andrés Manuel se negó a aceptarlos con el argumento de que iban a revisar los estados de cuenta con las farmacéuticas porque “había mucha corrupción”. Siguiendo el script de los tratados internacionales, las farmacéuticas enviaron esos medicamentos a otros países y México se quedó por primera vez (en más de 60 años) sin medicinas para los niños con cáncer.
Hasta la fecha sigue la alharaca de la corrupción de las farmacéuticas, pero es la hora en que el gobierno de López Obrador no ha mostrado una sola prueba (y menos una acusación penal) contra alguna de ellas, porque simplemente no hay delito qué perseguir.
Al darse cuenta de su babosada, el presidente ordenó que se trajeran cuando antes los medicamentos oncológicos. Pero las farmacéuticas le contestaron que no son farmacias y no los tienen en los estantes. “Hay que pedirlos con un año de anticipación así que por favor fórmese en la cola” fue la respuesta.
A Andrés Manuel no le gustó la respuesta y las mandó al diablo, buscaría los medicamentos por otro lado y de aquí y de allá le han enviado pocos, caros (algunos 700% por encima del precio de las farmacéuticas) e incompletos.
De ahí que los niños sigan padeciendo… y muriendo
En dos años han fallecido más de 3 mil menores ante los ojos impotentes de sus padres que hartos de tantas mentiras, han protestado en calles y avenidas, han hecho bloqueos y plantones. Y ahora los acusan de formar parte (junto con sus pequeños) de una conjura internacional de la derecha para darle un golpe de Estado al gobierno de López Obrador.
Qué poca madre.
La desgracia es que los medicamentos siguen sin llegar. Este lunes el padre de uno de estos niños dijo al periodista José Cárdenas que el presidente prometió que este 26 de junio llegaría un cargamento procedente de Corea del Sur con medicamentos oncológicos y otra vez los volvieron a engañar.
En efecto, la mentira no es de ahora, López Obrador la ha repetido varias veces en sus mañaneras. Sabemos lo que sufren los niños si no tienen los medicamentos… Estamos procurando que nunca les falten, dijo el 12 de octubre del 2020. Y el pasado 27 de mayo repitió una vez más el numerito: Ya están llegando, no van a faltar los medicamentos.
Y nada, nada de nada. Mientras los padres “golpistas” miran acongojados, con la rabia y frustración contenidas, cómo se va con el paso de los días la vida de sus pequeños.
Sigo sosteniendo que sólo por este hecho Andrés Manuel López Obrador deberá responder ante los tribunales internacionales. Pero no irá solo sino acompañado de su científico de cabecera Hugo López-Gatell, “uno de los mejores científicos del mundo” según sus propias palabras.
A ver si los jueces internacionales le creen el cuento del golpe de Estado.
López-Gatell jamás debió ser responsable de la conducción de la pandemia del COVID y menos del abasto de medicamentos, porque dejó de ser un científico digno de su profesión para convertirse en un leguleyo servil delpresidente.
Su lambisconería se tradujo en miles de muertes, pero más temprano que tarde tendrá que afrontar un juicio penal y salvo su abogado, no tendrá a nadie más que lo defienda.