Nunca había escuchado el nombre de Roberto Palazuelos hasta hace unos días en que me comentaron que Movimiento Ciudadano (MC) lo lanzaría como su candidato a gobernador de Quintana Roo. No lo conocía porque no me gusta el género de las telenovelas donde se hizo tan famoso. Otro caso más, pensé, de un partido que recurre a una celebridad para ganar votos. Nada nuevo. Ahí está Donald Trump, por ejemplo.
Vivimos en una democracia donde todos tienen el derecho a ser votados. Bienvenidos los que tengan fama pública por su profesión, siempre y cuando sea legal. Suelen atraer muchos votos por su gran reconocimiento de nombre. Como gobernantes, en cambio, son más bien malones, debido a su inexperiencia. Como dice Héctor Aguilar Camín, “sólo hay una cosa peor que un político profesional: un político no profesional”. El ejemplo perfecto es Cuauhtémoc Blanco, pésimo gobernador de Morelos rodeado de hampones.
Dante Delgado, fundador y líder de MC, tiene la fama de fichar buenos candidatos que dan la pelea en las elecciones, a pesar del pequeño tamaño del partido. Han ganado, incluso, dos gubernaturas en estados de gran peso económico y poblacional: Enrique Alfaro, en Jalisco, y Samuel García, en Nuevo León.
En los últimos años, MC ha crecido gracias a buenos fichajes y una estrategia que le apuesta a presentarse como un partido diferente. La tercera vía que ni se alía al partido gobernante (Morena) ni a las fuerzas políticas del pasado (PAN, PRI y PRD). Una y otra vez, MC ha reiterado que, en 2024, piensan ir solos en la elección presidencial, aunque esto divida el voto opositor beneficiando al candidato de López Obrador.
El fichaje de la temporada de MC ha sido Roberto Palazuelos para gobernador de Quintana Roo. Como mencioné, yo no lo conocía por ser un ignorante de la farándula. Ahora que Palazuelos ha entrado a la política, nos ha tocado conocerlo.
Ha sido una presentación desastrosa.
A finales del año pasado, cuando se rumoraba la posibilidad que iría por la gubernatura de Quintana Roo, la periodista Lydia Cacho lo criticó como “parte de la red de lavado de dinero, despojos y desapariciones en Tulum”, donde el actor es empresario hotelero. Palazuelos negó las acusaciones y amagó con demandar a Cacho.
Luego vino la primera gran nota que nos regaló Palazuelos. Se presentó en un programa sobre la farándula donde dijo: “Ninguna guerra sucia me va a parar y todas esas gentes que están difamándome, que están diciendo cosas, yo estoy apuntando, eh, no crean que no estoy apuntando, estoy apuntando y estoy tomando nota, ya llegará el momento, cuando yo sea titular del Ejecutivo, que ajustemos cuentas”.
Ah, caray, ¿así de plano? Preciosa perla de un mirrey hecho y derecho. Palazuelos luego se disculpó, pero el daño a su imagen estaba hecho.
No pasó mucho tiempo y en las redes apareció un video de una entrevista en 2020 de Palazuelos con Yordi Rosado. El precandidato de MC confiesa en las cámaras que participó en el asesinato de dos personas, no en una telenovela, sino en la vida real. Emocionado, admite:
“Yo traía una 3.80, con una portación de la Defensa, que es el calibre que puedes portar, traía a un teniente del Ejército con una 9 milímetros de uso exclusivo del Ejército y traía a un amigo mío colombiano, mafiosón, con una 9 milímetros más chueca que él, güey. Llegamos y se arma el show. Estamos tocando, abren la puerta y ¡pa-pa!, nos tiran dos madrazos al aire y nos encañonan con una pinche pistolita 22. Un gordote, güey. ¡Y, puta!, pues yo, con mi conocimiento jurídico, dije, ‘este güey ya le jaló, trae pólvora, si me lo chingo, es legítima defensa’. Y de repente veo que se estaba agarrando con el de la puerta y la chingada. ¡Se armó una puta balacera, Yordi¡ ¡Matamos a dos cabrones!”.
Rosado, entonces, le pregunta si él mató a uno. Responde el flamante emecista: “Todos, todo mundo les dio a todos […] se armó una pinche balacera de su chingada madre. Hasta el colombiano le jaló, el teniente, yo, ya ni supimos quién le dio a quién. Pinche balacera de su chingada madre”.
En un país serio, MC ya habría mandado a la chingada —utilizando el fino lenguaje de Palazuelos— a este personaje. Y alguna autoridad judicial ya lo habría citado para aclarar su confesión pública por participar en el homicidio de dos personas. A ver qué pasa. Si MC lo sigue apoyando, yo les diré a todos los emecistas que se presumen diferentes que, por favor, no me vengan con ese cuento tomando en cuenta la “finísima” persona que es su candidato a gobernador en Quintana Roo.
Twitter: @leozuckermann