ANTE el desbarajuste político que se advierte en este momento, tanto a nivel nacional, como aquí en el Estado de Veracruz, no han faltado las voces de mucha gente que desean que venga Dante Delgado Rannauro, para competir en las próximas elecciones por la gubernatura de la entidad.
No es, desde luego, santo de la devoción de muchos, pero el ex gobernador veracruzano, podría hacer mucho ruido en el proceso de sucesión gubernamental, ahora que todo apunta a una verdadera confrontación política entre personajes que tienen experiencia y una amplia penetración en el ámbito político estatal.
Connotados políticos de Veracruz, ven con agrado que Dante, piense en participar, porque se afirma que es necesaria una voz firme de alguien que pueda dominar el escenario político y sirva de contrapeso para un partido político en el poder que ha visto disminuidas sus posibilidades de seguir manteniendo el control político de la entidad, luego de los escándalos que se han producido a nivel nacional, con repercusión en esta entidad.
Sin embargo, hasta donde se sabe, Dante, no tiene la intención personal de buscar la gubernatura, sino a través de otro personaje que ya estaría contratando para su partido político y lanzarlo desde su plataforma en forma individual, es decir, sin tener que aliarse, en todo caso, con los demás partidos políticos que hasta ahora han mantenido el compromiso de participar en forma aliada para hacer fuerza necesaria y derrotar a morena. Dante, quiere que su partido proponga la mejor opción y seguramente que lo va a hacer, porque él, al parecer, estaría ocupado en el proceso de sucesión presidencial, donde también quiere que su partido vaya solo en esta contienda político electoral.
De cualquier manera, la aceptación popular para que venga directamente en busca de la gubernatura, le servirá de mucho en el caso de que sea su partido político quien proponga un candidato con muchas posibilidades de triunfo. Hay, incluso, versiones de que ya se entrevistó con Pepe Yunes, sin que se sepa, hasta este momento, si hubo acuerdo o lo estarían analizando con más detenimiento. Hay, por ahora, muchas opiniones al respecto y algo, seguramente, tendrá que salir al final de este movimiento político.
Que venga Dante, son tan solo los deseos de personas que conocen al senador de la república, los cuales son muchos y le tienen mucha confianza, pero aún así, hay mucho trecho todavía que recorrer hasta en tanto llegue el momento preciso en que tengan que definirse las cosas.
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PEPE, SIGUE SIENDO UN POLÍTICO POPULAR.
PEPE YUNES, sigue siendo una buena opción para los veracruzanos. Le tienen confianza y saben que puede responder en una nueva oportunidad política para buscar la gubernatura del Estado. Es un político con experiencia, sumamente preparado y digno representante popular. Hay muchos veracruzanos a su favor y que estarían dispuestos a jugársela nuevamente con él, sobre todo, ahora que vendría con más enjundia política para sacarse esa espina que lleva clavada por mucho tiempo.
Su posición como diputado federal, es más que suficiente para aspirar de nueva cuenta a la candidatura de cualquier partido político, aunque lo más esperado es que lo haga a través del partido revolucionario institucional, organización política que le ha dado siempre la oportunidad de participar en los procesos electorales donde ha sido candidato de lujo, aunque poco apreciado por quienes tienen el poder de decidir.
Es casi seguro, por lo que se sabe, que Pepe Yunes, estará en las boletas de la próxima elección de gobernador en Veracruz, ya sea por el PRI, por una alianza política que lo proponga o bien por algún otro partido político que le vea las posibilidades que tiene de ganar esta vez.
Pepe, ya fue candidato a la gubernatura del Estado, y aunque no ganó, en su haber existen otras experiencias políticas donde ha ganado ampliamente, respondiendo, como ahora, en su labor permanente de legislador federal.
También la gente, podría pedir que venga Pepe Yunes.
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A MORENA, LE CAMBIA EL ESCENARIO.
NO ES PARA RETROCEDER, pero los aspirantes a la gubernatura del Estado, que militan en el partido político en el poder, se están dando cuenta de los cambios que existen en el escenario político estatal.
Tanto Rocío Nahle, como el mismo Sergio Gutiérrez Luna, y hasta quizá el propio alcalde de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuill, lo estarán pensando más de una vez, luego de que las cosas, en tan solo una semana, se han modificado con respecto a la confianza popular del presidente de la república, quien ha bajado considerablemente en la aceptación popular y ya no sería el respaldo necesario para quienes creen que su persona seguiría siendo el punto de referencia política más importante que tuvieran los aspirantes, tanto a la presidencia de la república, como aquí, en Veracruz, con la gubernatura del Estado.
Esto es importante, porque el gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, ganó en las elecciones del primero de julio del dos mil dieciocho, gracias a la influencia política que tenía, en ese momento, Andrés Manuel López Obrador. De otra manera, las cosas serían distintas.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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