Pareciera mentira, una auténtica pesadilla, el que todavía haya gente que se deja manipular, sin cuestionar nada. Evo Morales comentó que “los medios de comunicación occidentales que responden al imperialismo y al capitalismo, son peores que la bomba atómica”
Pero la falta de razonamiento y sentido común es consecuencia de crecer adoctrinados en que tienes que creer absurdeces totalmente contrarias al saber y la cordura…
Como quienes dicen que solo hay que vivir en el presente. Que es lo que aconsejan los que se dicen sabios -cuando el presente es producto del pasado y la base del futuro- por lo tanto, es vivir una vida sin ninguna proyección, sin ningún sentido…
Y así, como todos los diarios dicen horror y media de los rusos, es especial de su Presidente, el muy astuto Vladimir Putin, se suman a la cargada y maldicen que el mundo esté en vilo por un tal por cual…
Soslayando que la guerra y sus prolegómenos no son la decisión de una sola persona. “Está loco”, dicen algunos del ruso; y todos al unísono llaman invasión a la intromisión rusa en Ucrania…
Pero no llamaron invasión a lo que hicieron los norteamericanos cuando se metieron en Irak; donde nadie los llamó y han muerto casi un millón de personas. O en Siria, de donde no se quieren salir; cuando nunca fueron solicitados -hace un par de días se comentó en este mismo espacio-…
A pesar de que la gente entiende que la Prensa está manipulada. Que todo lo que dicen es porque les conviene; y que una y mil veces se ha demostrado que engañan, que mienten; no obstante, inexplicablemente les siguen creyendo todo lo que dicen. Que caminó sobre las aguas; que resucitó; que los va a venir a salvar ¡ah! muy bien; todo muy bien…
Volviendo a Irak: ¿Dónde están las armas de destrucción masiva? Porque destrucción fue la que provocaron y dejaron a su paso. Cuando ahí todos vivían en paz y vivían bien. ¡Controlados!; pues sí. Pero…
Aunque sea duro decirlo; ¿en qué otra forma se puede controlar a una bola de salvajes que son capaces de matar por un celular; o son capaces de evadir impuestos. En Corea del Norte fusilan al que roba. Tú robaste. Pum, se acabó; sea quien sea. Y la gente no roba…
Siglos de educación han de haber pasado para que, en Japón, no solamente nadie roba; devuelven lo que la gente perdió. Hay oficinas de objetos perdidos. Y aquí ya sabemos lo que pasa en la dependencia de los bienes “recuperados”. Finalmente se han de ir con la finta de que “ladrón que roba ladrón, tiene cien años de perdón”…
A la gente de bien, poco le importa que, viviendo en un Estado de Derecho, las Autoridades sean extremadamente duras. Si no se infringen las Leyes; no hay problema. Y que les corten las manos a los rateros, me parece muy bien…
La Ley del Taleón -vocablo derivado del latín Tallos, o Tale, que significa idéntico, semejante; y finalmente deriva en Tal; pero viene desde el Código de Hammurabi– me parece excelente…
Y no veo por qué los puritanos se estremecen cuando no solo es un principio religioso -con la vara que midas; ojo por ojo…- también, el que todo se regresa es una Ley de Física…
Que los padres no duerman tranquilos cuando sus hijos salieron a divertirse; o cuando el pequeño de la casa va a la tienda de la esquina y se tarda 10 minutos; cuando antes se le gritaba al hijo y si no venía, es porque andaba metido en la casa de algún vecino…
Ciertamente que los tiempos han cambiado. Antiguamente, los juegos unían a los pueblos e interrumpían las guerras. La justa se media en el deporte. Hoy el deporte, o, mejor dicho, los que manejan el deporte, dividen a los pueblos…
Cuando los deportistas lo que quieren es participar, ganar, competir contra todos, no nada más contra unos. Luce vergonzoso que, haciendo resonancia con la invasión a Ucrania, han decidido excluir a los deportistas rusos de cualquier clase de competencia en el mundo…
Hasta pareciera que lo agarran de pretexto porque quieren repartirse las medallas que no ganarían si los rusos compitieran. Pero han llegado a tal grado de fanatismo que, en la Federación Internacional Felina, han impuesto sanciones a los gatos rusos…
Ningún gato que viva en Rusia podrá participar en ninguna exposición, ni podrá ser importado y registrado en su Federación. “Aunque Usted, no lo crea”. Pero habrá que esperar a ver que dicen los gatos.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.