Agencias/Sociedad 3.0
El Festival de cine de Cannes se sumó este martes al veto lanzado contra Rusia por parte de grandes acontecimientos internacionales y decidió excluir este año a las delegaciones oficiales rusas o a toda instancia vinculada al Gobierno ruso.
«Dado que el mundo se ha visto afectado por una fuerte crisis en la que una parte de Europa se encuentra en estado de guerra, el Festival de Cannes desea extender todo su apoyo al pueblo de Ucrania y a todos los que se encuentran en su territorio. Por modesto que sea, unimos nuestras voces a las de quienes se oponen a esta situación inaceptable y denuncian la actitud de Rusia y sus líderes», señaló en un comunicado el certamen, que celebrará su 75 edición del 17 al 28 de mayo.
«Durante este invierno de 2022, el Festival de Cannes y el Marché du Film han entrado en su fase de preparación. A menos que la guerra de asalto termine en condiciones que satisfagan al pueblo ucraniano, se ha decidido que no recibiremos delegaciones oficiales rusas ni aceptaremos la presencia de ninguna persona vinculada al gobierno ruso», añadieron.
Su comunicado no citó expresamente un posible veto a películas rusas en su selección oficial, pero sí aclaró que la decisión de excluir a las delegaciones o instancias oficiales rusas estará vigente salvo que la guerra cese en unas condiciones que satisfagan a la población ucraniana.
El Festival destacó el coraje de todos aquellos que, en Rusia, han corrido el riesgo de protestar contra la agresión y la invasión de Ucrania. Entre ellos se encuentran artistas y profesionales del cine que nunca han dejado de luchar contra el régimen contemporáneo.
Es la ocasión de recordar que la primera edición del certamen de Cannes debería haber tenido lugar en 1939 e inaugurarse el 1 de septiembre, día de la invasión de Polonia por parte de Alemania, por lo tanto, fue cancelado.
Dos días después, Francia y Gran Bretaña declararon la guerra a Alemania, dejando de lado durante algunos años los planes para organizar un festival de cine en el sur francés.
«Fiel a su historia, que comenzó en 1939 en resistencia a las dictaduras fascista y nazi, Cannes se pondrá siempre al servicio de los artistas y profesionales de la industria, que alzan la voz para denunciar la violencia, la represión y las injusticias, con el objetivo principal de defender la paz y la libertad», puntualizaron.