sábado, noviembre 23, 2024

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No hace mucho, a mitad del Siglo pasado, los mexicanos teníamos al “Charrito Pemex”, un muñequito patizambo, lógicamente vestido de charro, con sombrero y toda la cosa.  Eran tiempos en que Pemex se recuperaba después de haber sido bloqueada y nadie nos compraba petróleo…

Que fue el precio que los mexicanos gustosos pagaron por la nacionalización.  Hay fotos y gastadas películas que plasman la conmovedora reacción de un Pueblo, pobre, pero unido.  Ora sí que cabe aquello de que estábamos mejor, cuando estábamos peor…

Ya no se ve esa miseria en el campo, porque esos hombres se fueron al Norte.  A hacer lo mismo que hacían aquí; pero allá les alcanza hasta para mandar dinero.  Por cierto, que vanagloriarse porque las remesas cada vez son más altas, debiera dar vergüenza…

Son hombres valiosos que tuvieron que ir a enriquecer otras tierras con su trabajo, porque aquí el Gobierno nunca los apoyó; a pesar de que en aquél entonces, y desde siempre, el hombre ha vivido gracias a los hombres del campo.  Curiosamente, considerados inferiores…

Y que no salgan con que no es cierto, el solo ver cómo es que viven los que producen la comida; y cómo viven los que se la comen, no hay mucho más que agregar.  Pero ante tanta arrogancia no se puede hablar de Justicia…

Pero estábamos con el “Charrito Pemex”, y los años 50s cuando México era exportador de petróleo, antes que las petromonarquías, que como potencias petroleras son posteriores a la Segunda Gran Guerra…

Y hay que ver la diferencia de países. Ya en estos tiempos estamos viendo el daño que hacen a las naciones los bloqueos comerciales.  No importan si son milenarias, como Irán, o “recientes”, como Cuba o como Venezuela; a cuyo Presidente le han endilgado una campaña de desprestigio, que ya no hay nadie que hable bien de Maduro…

Lo han denostado hasta cansarse; pero el hombre sigue ahí, a pesar de los intentos de asesinarlo y de que es frecuente que aquí en México se pregunte si quieres que estemos como Venezuela…

Y yo, francamente si quisiera que estuviéramos así y que Maduro fuera nuestro Presidente.  Seguro que no se quedaría callado si Trump lo insultara; ni tampoco se sabe que tenga hermanos y familiares corruptos…

Y con mi opinión respecto a Maduro, seguro que habrá muchas, muchísimas mujeres que estarán de acuerdo.  Pues que se sepa, allá no hay feminicidios; como aquí.  Y las mujeres pueden andar en las calles, al igual que en Cuba, sin miedo a que las violen o las asesinen…

Y qué decir de los niños a los que ni secuestran ni descuartizan.  Que no están pegados todo el día a su teléfono; y que saben jugar y divertirse sin juguetes…

Lo cierto es que, regresando con Venezuela, creo que tendremos que aprender mucho de ellos, pues resulta que la hermana República Bolivariana será de los pocos países, de hecho, el 3ero en Iberoamérica, que tendrá un fuerte crecimiento, según dictan las casas que a eso se dedican…

Por lo tanto, lo que parece ser cierto, es que algo no estamos haciendo bien en México, cuando teniendo para crecer mucha más historia y potencial que otras naciones, no solo estamos estancados, sino que vamos para atrás.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.

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