sábado, noviembre 16, 2024

Es tanto como patear el avispero…

“Que se busquen otro asunto”, dijo el señor Presidente, zanjando el tema de los Guacamayos.  Individuos sin duda merecedores de la Medalla Belisario Domínguez.  Seguro que el ilustre chiapaneco, fundador del periódico “El Vate”, se sentirá satisfecho y verá que su espíritu aún cabalga sobre los lomos del corcel de la Libertad de Prensa…

El misil de que se busquen otro asunto fue dirigido a los medios de comunicación, que no dejan de hablar, no del Hackeo a la SEDENA; no.  De lo que no dejan de hablar, ni dejarán, como dijo Don Teofilito, es de lo que día a día se está publicando a raíz del hackeo…

Pero ¿quién entiende al señor Presidente? Referente al espionaje, lo primero que dijo fue que sí era cierto lo que publicaron sobre su estado de salud; y que no se había sabido porque nadie informó del helicóptero de las Fuerzas Armadas verdes -los otros ya dicen que se caen solos- cuando aseguró que no utilizaría aviones del Gobierno…

Pero dada la emergencia, se pasa.  Aunque no ha cumplido porque hasta la señora Gutiérrez los ha utilizado.  Todo, según los Guacamayos; que seguramente no le harán caso, sobre todo cuando de un momento a otro, el libro de Elena Chávez y los Guacamayos tendrán punto de coincidencia…

Y entonces, el asunto de la corrupción salpicará hasta los cimientos del Estado; porque tienen material como para entretener a México, de aquí hasta el mero día de las elecciones del 24 y lo que le sigue.  Digo, si es que llegamos, pues el tramo aún se ve todavía muy lejano y todo lo que falta por saber, sacudirá a la Patria como un terremoto…

Pero el muy Peje -así le dicen- olvidó, aunque se justifica porque ya se le va el avión, que lo peor que pudo haber hecho, es dar por terminado el tema de los Guacamayos y su interesante información…

Lo más prohibido es casi siempre lo más deseado.  Solo recordar El crimen del padre Amaro; que, por tratar de impedir su exhibición, fue todo un éxito de taquilla.  Que es más o menos lo mismo que está pasando con “El Rey del Cash”…

Y no se puede pensar que los Guacamayos empezaron por lo más escandaloso.  Solo abrieron boca y seguramente faltan cosas más interesantes y escandalosas…

Sí alguien se consigue la exclusiva con los Guacamayos y todas las mañanas pasa la sección correspondiente a lo descubierto por las hermosas y coloridas aves parlanchinas, seguro que acabaría haciéndole competencia a las mañaneras…

Aunque el propio Presidente les ponga mucha crema a sus tacos y diga que “las mañaneras son las mañaneras”.  Mismas que, aquí entre nos, ya aburren.  Siempre lo mismo.  Todo es culpa de los conservadores; y que vamos bien…

Las cifras se alteran para estar acorde con el optimismo gobernante, pero los hechos son otros y ya no hay manera de ocultarlos.  Primero si decían la verdad y ahora ya no les conviene ¡Ajá!

No vaya siendo, que en lugar de buscarse otro asunto, mejor se buscan otro Presidente; pues estar en manos de un mitómano es ciertamente un peligro.  Pues obstaculizar la Justicia, es un delito que en EE.UU. le costaría el cargo a cualquiera…

Pero aquí, se hace todo lo necesario para proteger la corrupción fraterna de Pío y Martín, que echa por tierra la cantaleta de que no son iguales.  Pero la cereza del pastel, cuando menos hasta el momento, es, para no variar, del Presidente López Obrador…

Que sin poner a Chico Ché, ni recordar poemas, adoptó la seria figura del papá que acude al colegio de su hijo a defenderlo, acusando de que le hacen bullying a su pequeño; en este caso, poco faltó para que dijera, lo que quieran con él, conmigo…

No se sabe si obedeciendo órdenes del cinco estrellas, el cuatro estrellas calló.  Otros dicen que le faltan estrellas para poner las cosas en su lugar; como antaño lo hicieron quienes lo antecedieron; pues finalmente duela o no, se quiera reconocer o no, los militares son los que mandan…

Ningún Mandatario, no es la primera vez que lo digo, puede sostenerse en el cargo si los militares no quieren. Ni Biden, ni Putin, ni Xi, ni Kim Jung un. Lo escribí a raíz del telefonazo que le llegó por la red a Evo…

Por lo que salir con que fue “un rotundo fracaso” el hackeo a la Secretaría de la Defensa.  Es tanto como patear el avispero.

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