Agencias/Sociedad 3.0
El acierto de Solly March hundió al Liverpool, derrotado 3-0 con un doblete y una asistencia de un ‘hombre club’ que bastaron al Brighton para superar a su rival en la clasificación y mandarle a cinco puntos de distancia de la última posición que da acceso a los puestos europeos.
Esa plaza, de momento es para el Tottenham. El Liverpool, poco a poco, se aleja de ella. Sobre todo, después de sus últimos dos pinchazos que evidenciaron que su reacción de cuatro victorias consecutivas (Leicester, Aston Villa, Southampton y Tottenham) fueron un disfraz para esconder el curso errático de los hombres dirigidos por Jürgen Klopp.
Si la pasada jornada perdió ante el Brentford (3-1) y hace días empató en la Copa de Inglaterra frente al Wolves (2-2) para emplazarse a un partido de repetición, este sábado volvió a ceder puntos para evidenciar su mal momento sobre el césped.
March se encargó de sacar a la luz todas las carencias del Liverpool, muy timorato en defensa con una falta de contundencia alarmante. El jugador del Brighton, que a sus 28 años es una ‘rara avis’ del mundillo tras lucir únicamente la camiseta de su club durante las últimas doce temporadas, terminó el duelo con el único doblete de su carrera bajo el brazo.
Poco acostumbrado a marcar -suma quince tantos en la última década en todas las competiciones-, jamás celebró dos goles en un mismo partido. March, eligió un rival de postín para estrenarse.
Pero antes de romper sus estadísticas asustó pronto, a los ocho minutos, con un lanzamiento peligrosísimo que despejó providencialmente un defensa del Liverpool. Fue un aviso y después de una primera parte sin mucha historia, March apareció de nuevo en los compases iniciales del segundo acto para reventar definitivamente el choque.
Un robo del incansable Alexis Mac Allister en el centro del campo propició el primer tanto del centrocampista inglés. El campeón del mundo argentino cedió la pelota a Kaoru Mitoma y el japonés, a su vez, la colocó cerca del punto de penalti. Y, por allí, apareció March como un cohete para abrir el marcador con un disparo imposible para Alisson.
Apenas cinco minutos después, otra perdida en el centro del campo «red» propició el segundo del Brighton. En esta ocasión, fue Evan Henderson, con un gran pase al hueco, quien permitió a March lucirse con un zurdazo cruzado preciso que puso el choque muy cuesta arriba al Liverpool.
Aunque Klopp intentó reaccionar con la entrada simultánea de Ben Doak, Naby Keita, Joe Gómez y Harvey Elliott, el marcador sólo se movió del lado que no deseaba el técnico alemán. Y, nuevamente March, esta vez con una asistencia, fue protagonista.
Danny Welbeck no la desaprovechó y el Liverpool recibió un jarro de agua fría de realidad. No está bien, no carbura y ya son veinte jornadas de Premier League. Aún tiene tiempo para reaccionar, pero la realidad es que pasado el ecuador del campeonato, no está ni en puestos europeos. El título, hace tiempo que pasó al olvido.
Información de EFE