RESULTA que, a raíz de la aparición de Xóchitl Gálvez Ruiz, como aspirante a la candidatura de la coalición “Va por México” para buscar la presidencia de la república en el primer domingo del mes de junio del año entrante, las corcholatas del presidente de la república, que también buscan la candidatura para el mismo fin, pero a través de Morena dejaron de ser noticia y se han visto relegadas a meras figuras decorativas de la cuarta transformación.
En algunos casos han callado y sus precampañas internas ya no tienen el mismo impacto con el cual se vinieron presentando en el escenario político nacional, principalmente, porque el mismo mandatario nacional ha perdido por completo el manejo mediático que venía generando para apoyar a sus aspirantes, lo que, indudablemente los pone fuera de contexto político y hasta podría decirse que los ha dejado solos para ocuparse de otros menesteres como es el ataque permanente y constante que ha iniciado en contra de la senadora Xóchitl Gálvez Ruiz, a quien ve como su propia opción para que sea la candidata de sus opositores.
Tanto se ocupa el presidente de la legisladora federal, a quien le negara la entrada a palacio nacional, para participar en la mañanera y defenderse en el mismo púlpito presidencial de las infamias recibidas en días anteriores, que pareciera que la verdadera corcholata que ha destapado circunstancialmente es la que quisiera en su partido para contender en las elecciones constitucionales para que le sucediera en el poder y en su proyecto diseñado como cuarta transformación, al grado de que se ha olvidado de sus propios aspirantes y hasta de Claudia Sheinbaum, de quien se dice es la preferida para la candidatura de Morena.
López Obrador, ya perdió el control de la agenda político electoral y su quehacer en este momento se encuentra centrado en descalificar a la posible candidata de la oposición en vez de apurar a sus propios aspirantes a que refuercen las acciones en virtud de que las cosas se están calentando demasiado en relación a sus propios adversarios políticos.
Por lo pronto, tal ha sido el impacto político que ha tenido Xóchitl Gálvez Ruiz, que sus corcholatas han callado y se han visto expuestas al rechazo popular como le sucedió recientemente a la ex jefa del gobierno de la ciudad de México, Claudia Sheinbaum, en el Estado de Nuevo León, donde tuvo que quedarse prácticamente muda ante manifestaciones de repudio popular.
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POSIBLES TRES FINALISTAS DE “VA POR MÉXICO”
YA REGISTRADA CASI la totalidad de aspirantes a la candidatura del bloque opositor a la presidencia de la república, desde ahora se puede percibir que los finalistas de esta competencia interna de la coalición política de los tres partidos políticos más importantes de México, serán Beatriz Paredes Rangel, Xóchitl Gálvez Ruiz y Santiago Creel Miranda. Ellos son, hasta ahora los más posicionados en la competencia interna y parecen las opciones más adecuadas de donde pudiera salir el candidato definitivo, considerando, de la misma manera que de los tres, los dos que quedaran fuera podrían sumarse sin ningún problema al proyecto político de la coalición sin que pudiera darse alguna desbandada en cualquiera de las tres organizaciones políticas.
Desde luego que la coalición tiene mas enlistados de donde escoger a su candidato, pero de acuerdo a las preferencias políticas que en este momento ya se vienen ofreciendo, lo más probable es que, finalmente, queden los que se han mencionado para que se tenga un candidato confiable y competitivo frente a Morena y su respaldo oficial.
De esta manera la oposición se ha fortalecido considerablemente y se están dando las condiciones para que las elecciones en la pronta sucesión presidencial, sean altamente competitivas y democráticas, aunque esto puede estar generando una gran preocupación en el bunker de Morena, donde no pensaron nunca que este proceso se les complicaría demasiado, en cierta forma por la misma actitud presidencial que ha sido la principal responsable de esta condición política que les presenta.
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CAMBIA, DE PRONTO, EL PANORAMA POLÍTICO NACIONAL
HASTA HACE POCOS DIAS, cualquiera de los ciudadanos mexicanos, estaría plenamente convencido de que ganarle a Morena la presidencia de la república, era algo más que imposible.
Sin embargo, esta idea ha variado en este corto periodo de tiempo en la vida política nacional, después de que la oposición ha conseguido posicionarse con la lista de aspirantes a la candidatura para buscar la presidencia de la república, de donde tiene muchas opciones por las cuales decidirse y presentar, como se tiene anunciado, una candidatura definitiva el tres o cuatro de septiembre próximo.
La circunstancia política que vino a modificar, de la noche a la mañana, el panorama político nacional, fue la aparición de la senadora de la república Xóchitl Gálvez Ruiz, quien no era aspirante a la candidatura presidencial, sino al gobierno de la ciudad de México, pero las cosas cambiaron por la creencia del mismo presidente, de que no habría alguien que se le pudiera enfrentar y menos que fuera, precisamente, una mujer con los tamaños que tiene la propia senadora panista.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.