Dr. Rafael Vela Martínez
La seguridad alimentaria es un tema fundamental para el desarrollo sostenible y el bienestar de cualquier país, región o entidad federativa de que se trate. Se refiere a la disponibilidad y acceso a los alimentos suficientes, seguros y nutritivos que satisfagan de manera permanente las necesidades nutricionales y alimenticias de la población. La seguridad alimentaria es un pilar fundamental para la salud pública. Cuando la población tiene acceso a alimentos seguros y nutritivos, se reduce la incidencia de enfermedades relacionadas con la desnutrición y la malnutrición. Además, una dieta equilibrada es esencial para el desarrollo físico y cognitivo adecuado, especialmente en niños y jóvenes en edad de crecimiento.
En lo que corresponde a los últimos eventos asociados con la pandemia ocasionada por el COVID-19, habría que señalar la relación que se advierte entre la INSEGURIDAD ALIMENTARIA y los fallecimientos por el CORONAVIRUS. La relación entre la inseguridad alimentaria, la malnutrición y el COVID-19 es compleja. Por un lado, la pandemia ha afectado negativamente a la disponibilidad, el acceso, la utilización y la estabilidad de los alimentos, al provocar el cierre de actividades productivas, el desempleo, la pérdida de ingresos, el aumento de los precios, las restricciones al comercio y al transporte, las interrupciones en las cadenas de suministro y la reducción de la asistencia humanitaria; todo ello, es evidente que ha propiciado mayor inseguridad alimentaria a nivel mundial, pero principalmente entre los países regiones y entidades, como el caso de Veracruz, con grave dependencia alimentaria y crisis en su sector agrícola.
Según el Reporte Global sobre las Crisis Alimentarias (GRFC), en 2020 hubo 155 millones de personas en 55 países que enfrentaron niveles de inseguridad alimentaria aguda, lo que representa un aumento del 20% respecto a 2019. Además, se estima que 270 millones de personas están en riesgo de padecer hambre extrema en los próximos dos años, pues los conflictos geopolíticos a nivel mundial han agravado esta tendencia; y por supuesto que este fenómeno del hambre se agudizará donde existen gobiernos irresponsable y faltos de compromiso social y con la vida.
Pues bien, la hipótesis que veníamos argumentando, un servidor y el Dr. Claudio Rafael Castro López, cuando mapeamos la inseguridad alimentaria en las Zonas Metropolitanas de Veracruz (ZM), sostenía que la malnutrición aumentaba el riesgo de contraer y morir por COVID-19, pues cuando una persona está mal alimentada, se debilita el sistema inmunológico y esto favorecer la presencia de enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. Acerca de esta hipótesis, todo indica que ha quedado comprobada, pues hoy en día se tiene claro que estas enfermedades son factores de comorbilidad que agravan el pronóstico y la letalidad del COVID-19. De acuerdo con el análisis derivado de la información proporcionada por sector salud en México, el 56.3% de los fallecidos por COVID-19 presentaban obesidad, el 40.7% diabetes y el 23.8% hipertensión arterial. Asimismo, se ha observado una mayor prevalencia de estas enfermedades entre los grupos más pobres y marginados, lo que refleja las desigualdades sociales y económicas que determinan el acceso a los alimentos y a los servicios de salud .
En lo que corresponde al estado de Veracruz se han registrado un total de 14,688 fallecimientos por COVID-19 hasta el 9 de septiembre de 2023. Esta cifra representa el 5.4% del total de fallecimientos por COVID-19 en México, que asciende a 271,765 según la Secretaría de Salud. El estado de Veracruz ocupa el cuarto lugar a nivel nacional en número de fallecimientos por COVID-19, después de la Ciudad de México, el Estado de México y Jalisco. La tasa de letalidad en Veracruz es del 13.2%, superior al promedio nacional del 9.5%. Los municipios con mayor número de fallecimientos por COVID-19 en la entidad son: Veracruz con 1,656; Coatzacoalcos con 787; Poza Rica con 657; Xalapa con 867 y Córdoba con 338.
Evidentemente las autoridades del Gobierno del Estado de la actual administración no han hecho nada por revertir las condiciones de INSEGURIDAD ALIMENTARIA que prevalecen en la entidad; el próximo 17 de noviembre el INEGI dará a conocer los resultados del Censo Agropecuario 2022, donde se demostrará la tesis que en este espacio he defendido de la crisis agrícola en la entidad y la incompetencia e irresponsabilidad de quienes nos gobiernan para revertir esta tendencia que propicia dependencia alimentaria, desnutrición, pobreza extrema en aumento y, en síntesis, inseguridad alimentaria, que es un factor condicionante de la letalidad frente a la posible reactivación del COVID, con sus nuevas variantes.
A continuación presento los resultados de 2 años de investigación, publicados por la Universidad de Xalapa (pues en la Universidad Veracruzana se tardan en promedio más de 2 años en publicar este tipo de trabajos), con el ánimo de salvar vidas. No vendo esta información, esta libre para descargar en www.enfoqueveracruz.org, ojalá y los aspirantes a la gubernatura, quien quiera que quede, retome este esfuerzo y, sobre todo, lo utilice para salvar vidas de veracruzanos, ya que a este gobierno le valió sorbete prevenir y evitar la alta mortalidad derivada de la asociación entre inseguridad alimentaria y el COVID-19.
- COLECCIÓN. Seguridad alimentaria por AGEBs en Zonas Metropolitanas de Veracruz: una estrategia para salvar (2021)
ISBN:978-607-8668-66-3.
- Tomo I: Zonas Metropolitanas de Coatzacoalcos, Minatitlán y Acayucan
- Tomo II: Zonas Metropolitanas de Orizaba y Córdoba
- Tomo III: Zonas Metropolitanas de Poza Rica y
Se construyeron 2 Índices con base en la metodología de la FAO: Índice de Seguridad Alimentaria 1, que se expresa ISA-1, para hogares que cuentan solamente con personas mayores de edad; y, el Índice de Seguridad Alimentaria 2, que se expresa ISA-2, para aquellos hogares que cuentan con personas mayores y menores de edad. Para el mapeo se empleó una técnica de colorimetría: entre más se obscurece el color y tiende a guinda-café existe mayor INSEGURIDAD ALIMENTARIA; en sentido opuesto, entre más tiende a amarillo-verde en la AGEB, existe mayor SEGURIDAD ALIMENTARIA. La obra comprende más de 500 mapas; por cuestiones de espacio solo se presentan los resultados de los Índices de Seguridad Alimentaria 2; es decir, ISA-2 de los principales nodos urbanos de algunas Zonas Metropolitanas.
Es importante señalar que una AGEB es un Área Geográfica con Estadísticas Básicas, así determinada por el INEGI; y que en sentido práctico es una agrupación de manzanas, hablando en términos urbanísticos. A continuación los resultados de las ZM donde se presume están los hogares con mayores ingresos; queda por investigar lo que sucede en cada municipio de orden rural en la entidad; y seguramente ahí encontraremos la razón (desnutrición, pobreza e inseguridad alimentaria) de por qué Veracruz registró tantos fallecimiento a causa del COVID-19. Esto evidentemente NO se va a encontrar en los informes de gobierno.