Hace muchos años, Uriel Flores Aguayo sentenció: “Ustedes saben que en Xalapa, si hubiéramos postulado una vaca, ganamos también”, por el triunfo de la oposición en la capital veracruzana, llevando como ariete a Rafael Hernández Villalpando, un ex priísta, también ex perredista, que compitió por Convergencia y hoy es morenista.
Sí, en aquellos tiempos, la Atenas Veracruzana al igual que todo México, aspiraba aires de cambio en sus políticos… y en ese 1998, el PRI, partido en el poder, vivió el preámbulo del sentir ciudadano en las urnas cuando el PRD y el entonces Convergencia por la Democracia ganaron en Xalapa…
¿Qué pasó? Se combinaron muchos elementos, entre ellos, el exceso de confianza del PRI, acostumbrado a ganar de todas, todas y pensaban que sólo bastaba poner candidatos y ya.
La Oposición, en cambio, venía palpando el malestar social contra el otrora partidazo y si bien, fueron muy pulcros a la hora de seleccionar candidatos, al menos en Xalapa, razón tenía Uriel, ¡hasta con una vaca ganaban!
Esto es el mensaje que Cuitláhuac hace unos días mandó… similar al de Uriel, pero acercándose a esos aires de soberbia que vivía el PRI: Iván Joseph Luna.
El Coordinador de Comunicación Social del Gobierno del Estado cuenta con el respaldo del Gobernador en sus aspiraciones a un cargo de representación popular, que en buen castellano implica una curul.
El destape del peón por parte del Gobernador, fue aderezado con un ingrediente extraordinario, ¡mariaguana! Vea si no:
Dice que desde el 2012, su efebo viene haciendo talacha y cuando a Cuitláhuac lo lanzaron de candidato a Diputado federal, Iván Joseph puso su granito de arena en el triunfo… Por eso lo llevó a chambear con él a San Lázaro… ¡ay, ajá!
Pero el aderezo no acabó ahí… lo sazonó con ¿hongos? ¿O quizás hasta floripondio? Agrega que fue el diseñador de su campaña en el 2016, con Carlos Juárez Gil y Esteban Ramírez Zepeta. “Si a alguien le debo el éxito de haber dirigido la cuestión de publicidad, es a él”, comentó Cuitláhuac a los reporteros…
Ah bueno, el éxito de la campaña, asegura Cuic, es que de ser él un desconocido en Veracruz, pues había una aceptación de 2.56%, gracias a Iván Joseph, para mayo alcanzó a sus contendientes más posicionados, Héctor Yunes y Miguel Ángel Yunes Linares…
(¿Van sintiendo los aderezos?)
Bueno, para no hacerles la receta más larga que la lengua de Cuic, ahora resulta que si García Jiménez ganó en el 2018, ¡fue por Luna Landa! ¡Nada del efecto AMLO! ¡Nada del fenómeno político-social que representó López Obrador! ¡Nada del hartazgo electoral reflejado en las urnas contra el PAN y el PRI! ¡El señorito ganó gracias a las artes y dones de Iván Joseph Luna!
Sólo que hay un ligero error en la apreciación de Cuitláhuac con respecto al talento de su mancebo… no está para ser candidato a nada, ¡sino para “garantizar” el triunfo de Rocío Nahle en la próxima elección como su coordinador de campaña! El don que tiene para generar triunfos, no puede aplicarlo en él, sino en el mayor beneficio del partido, que al menos acá en Veracruz, sería enfocado en Nahle… ¿O por qué no el de Sheinbaum?
Ahora que si nos atenemos a lo que dijo Cuitláhuac, cito: “Iván se queda, si no ¿quién me va a transmitir?”, todo indica que le estarán regalando una “Pluri” al hacedor de Cuitláhuac…
Aunque ya sin mariguana, hongos ni floripondio, uno no deja de recordar a Uriel Flores Aguayo y ese exceso de confianza de aquel PRI, lleno de poder, que combinando a ambos, da lugar a parafrasear lo que creemos, piensa Cuic: “Si postulamos un buey, ganamos también!”