Oficialmente el día primero dieron inicio las campañas de los candidatos a presidente de la república, también de 128 candidatos al senado y de 500 diputados de índole federal, desde esta fecha al último miércoles de mayo, en sendos discursos para atraer la intención y ganar el voto ciudadano tendremos oportunidad de conocer las respectivas propuestas formuladas al pueblo de México por Xóchitl Gálvez, Claudia Sheimbaum y Jorge Laynez; mientras las dos primeras proponen cambios de rumbo según sus respectivas visiones de país, el tercero empareja la apuesta ofreciendo, también, un cambio de rumbo con más de lo mismo. Sin embargo, respecto a la campaña de hace seis años hay diferencias sustanciales y con formato adecuado a las circunstancias, pues las peculiaridades de los candidatos de ahora difieren de los de hace seis años, principalmente porque en esta ocasión son dos féminas las protagonistas, acompañadas en el reparto de relleno por un varón. Obviamente, ahora no participa un candidato como “el Peje”, quien personificaba la oportunidad de un cambio espectacular para México, y en contraste en esta campaña es parte central del debate. La esperanza del ayer se ha convertido ahora en la discrepancia de hoy: ¿Cuál camino escogerá México? cosas de la democracia, el pueblo bueno y sabio vota y el número manda.
Por otro lado, en 9 de las aldeas estatales también habrá renuevo de ejecutivos gubernamentales. Al unísono de las federales arrancaron las campañas por las gubernaturas de la CDMX, Jalisco y Yucatán; ayer la de gobernador en Guanajuato; el 16 de marzo será en Tabasco, en Chiapas el 21 de marzo, y las de Morelos, Puebla y Veracruz el 31 de este mes. En lo que corresponde a nuestra entidad la atención ciudadana está centrada en la pugna electoral que escenifican Rocío Nahle y Pepe Yunes, acompañados por el candidato de Movimiento ciudadano en el quizás involuntario papel de comparsa. Además, ese caldo de cultivo será adobado por cuanto acontezca en torno a cada una de las candidaturas al senado de la república y diputaciones locales y federales, y como son parte del reparto sin duda impactarán en el decurso de las campañas al gobierno estatal. No escapa a la atención ciudadana que el complicado devenir de la refinería de Dos Bocas opera como pesado lastre sobre la campaña electoral de Rocío Nahle, porque el desfase entre el costo originalmente proyectado (8 mil millones de dólares) y lo que realmente ha costado (más del doble), el tiempo de su edificación (tres años, pero cinco años después no se concluye), la fecha de su inauguración (dos veces deferidas), y su efectivo arranque de funcionamiento, ha sido motivo de fundadas observaciones, por lo que ya no sirve como argumento de eficiencia en adorno a la ahora candidata al gobierno veracruzano. Quiérase o no, existe una concomitancia entre las candidaturas a la presidencia con las de orden estatal, empero es pertinente advertir que, si bien el resultado electoral para la presidencia de la república no va a influir en el veredicto estatal, si en cambio es un hecho irrefutable que la votación estatal tendrá efectos sobre el resultado para la presidencia. ¿Quién entre Rocío y Pepe ganará el gobierno estatal? Corresponde a la ciudadanía veracruzana decidirlo.