sábado, noviembre 2, 2024

Dignos en la derrota y generosos en la victoria

Cuando era un niño, en una ocasión en un torneo de fútbol nos golearon de fábula. Lloré de coraje e impotencia, no podía aceptarlo. Les gritaba a mis compañeros por sus fallas, por su culpa nos habían metido todos esos goles. Mi papá me tomó del brazo y me llevó a un lugar aparte, solo me dijo: -si no aprendes a perder nunca sabrás disfrutar cuando ganes- . Tiempo después ganamos a otro equipo, yo felíz me burlaba de los perdedores, les hacía ver lo maletas que eran. Mi papá solo me vio y me dijo: -Recuerda cuando perdiste-.

Creo que practicar un deporte en la infancia, por poco que sea, nos enseña a ser un buen perdedor y a valorar cuando se gana, además también aprendemos a controlar nuestra frustración y a ser dignos en la derrota y generosos en la victoria.

También están los valores en casa, esos que se aprenden de los padres. Que nos enseñan que ser competitivos no es destruir al oponente, después de todo, si nos quedamos sin oponentes jugar se vuelve absurdo.

Pero es la educación de casa, esa que nos hace mejores personas. No se trata de pobres o ricos, de blancos o morenos, es solo ser una buena persona. Tampoco se trata de justificarse con que ellos eran peores, eso no debe ser, lo siento, solo los iguala en su mezquindad en todo caso.

Posiblemente todo esto que les digo de ser un buen perdedor sea una deformación de carácter de tantos años de ser seguidor del Cruz Azul. No lo niego, es justo lo que me gusta de mi equipo, la mística del buen perdedor. Pero es que no hay un buen ganador que sea mal perdedor. Para poder ganar y ser generoso en la victoria se tiene que saber perder con dignidad.

Coloquense donde quieran, pero el ser vengativo y cruel con el perdedor no te hace una persona digna ni decente, mucho menos una persona que pueda dirigir el destino de todos, ganadores y perdedores..

Las elecciones terminaron, ganaron todo lo que podían ganar. Disfruten la victoria con generosidad y vean en la dignidad del perdedor la posibilidad de competir en un futuro. Justo eso es y debe ser el espíritu democrático.

En opinión, en este manicomio entre dos mares que llamamos México vamos a vivir todos juntos. Si creen que es buena idea dividirnos entre ganadores y perdedores, les aseguro que no lo es. Dividirnos es la semilla de la confrontación y el conflicto entre hermanos.

Desde estás líneas felicito a la Dra. Claudia Sheinbaum y a la Ing. Rocío Nahle, así como a todos los que resultaron ganadores en este proceso electoral. Espero de todo corazón que México en su gestión sea más próspero, con mejor salud y educación, así como mucho más pacifico de lo que es hoy. Como mexicano y veracruzano estoy a sus órdenes para hacer de este país y este estado un lugar mejor para todos.

Nota al pie. A mi no me molesta ni me ofenden los insultos, por el contrario, siempre he pensado que el insulto y la agresión definen perfectamente al que los profiere.

Jorge Flores Martínez

jorgeflores1mx@hotmail.com

X: @jorgeflores1mx         

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