miércoles, diciembre 18, 2024

¿Traición o incompetencia de la Rectoría y de Cuitláhuac García?

Dr. Rafael Vela Martínez.

¿Qué tan grave es el desempleo y la falta de competitividad en Veracruz? Veámoslo desde el siguiente ángulo: de acuerdo con el INEGI en el 2020, del estado de Veracruz salieron 36 mil 493 personas para vivir en otro país, 81 de cada 100 se fueron a Estados Unidos de América. Para el periodo 2021-2024, se estima que han salido más de 135 mil veracruzanos para irse a radicar a Estados Unidos. La característica que comparten todos estos migrantes veracruzanos es que se fueron a buscar empleo y mejores ingresos, lo que expresa el alto grado de desempleo real que existe en la entidad y el bajo nivel de la calidad laboral: largas jornadas de trabajo y bajos niveles de ingresos, entre otros factores.

Frente a este escenario de desempleo, falta de actividades económicas productivas, bajos salarios, principalmente en el sector primario, los gobiernos de Veracruz han dejado pasar oportunidades para impulsar el desarrollo y crecimiento económico en Veracruz, debido a su falta de compromiso social, conocimiento en materia de planeación económica y visión para capitalizar las grandes oportunidades económicas que surgen en la coyuntura a nivel nacional y mundial, como en su momento el “boom” de la producción flexible  y actualmente el Nearshoring.

Pero existen incluso casos de impacto directo en la entidad, como en su momento fue la actividad petrolera en Poza Rica y luego en Coatzacoalcos en el siglo pasado, en cuyos casos jamás se logró capitalizar como polos de desarrollo, por ello es que me voy a referir brevemente al Proyecto Transístmico, que es una oportunidad económica de “oro”, que ha estado dejando pasar el Gobierno de Veracruz para proyectar a la entidad como un referente en el crecimiento económico nacional. 

Vengo regresando del 29º Congreso Nacional de Regionalistas de la Asociación Mexicana de Ciencias para el Desarrollo Regional (AMECIDER), donde convergen los mejores regionalistas del país y América Latina. En este evento presente mi investigación que se publicará antes de fin de año y que se titula: RETOS DEL PROYECTO TRANSÍSTMICO COMO PALANCA DEL DESARROLLO REGIONAL.

En esta investigación, después de un acucioso diagnóstico socioeconómico, de infraestructura, étnico, ambiental e hídrico, se realizan múltiples propuestas para cada uno de estos rubros y principalmente para el papel que deben jugar sus universidades públicas de ambas entidades para garantizar el desarrollo regional en los puntos donde se instalarán los 10 parques industriales del Interoceánico.    

Pues bien, algo común entre los gobiernos de Oaxaca y Veracruz, es que ninguno de ellos han capitalizado este proyecto que, ciertamente, para lo que se proyecta que debería ser, aun no lleva ni el 50% de su meta, y no me estoy refiriendo únicamente a la obra de infraestructura. En principio, hay que desechar la idea de que este proyecto reemplazará al Canal de Panamá en su potencial económico; veamos las siguientes breves cifras que soportan mi dicho: el Canal de Panamá tiene una capacidad de carga anual de 500 millones de toneladas. En términos de contenedores, el Canal puede manejar entre 14,000 y 15,000 TEUs (Twenty-foot Equivalent Units). Un TEU equivale a un contenedor de 20 pies de largo. En 2022, se estima que en el Canal de Panamá transitaron aproximadamente 5.5 millones de TEU; por su parte, también para el 2022, el Puerto de Veracruz reportó aproximadamente 1.2 millones de TEU de tráfico anual de contenedores; con la ampliación del Puerto, se prevé una capacidad de carga de 3 millones de TEU, algo no logrado hasta el momento. Por su parte, el Puerto de Coatzacoalcos ha reportado un tráfico anual de alrededor de 200,000 a 300,000 TEU. Es decir, en estos momentos quien realmente puede capitalizar el interoceánico es el Puerto de Veracruz, no Coatzacoalcos, pues las autoridades gubernamentales no realizaron las inversiones del caso. Por otra parte, el tránsito total del Canal de Panamá es de alrededor de 500 millones de toneladas al año; por su parte, el Puerto de Veracruz tiene una capacidad ferroviaria para mover 1.1 millones de toneladas anuales y, es evidente, que no existe capacidad carretera para desplazar este volumen de mercancías, ni viniendo de Coatzacoalcos a Salina Cruz, ni partiendo con el mismo destino desde el puerto de Veracruz, ¿debido a qué?. Esto es consecuencia de que el gobierno estatal jamás se planteó un proyecto carretero para capitalizar esta magna obra del  Interoceánico; es decir, dejaron a su suerte el proyecto de AMLO. ¿A esto también se llama traición o es incompetencia?.

El expresidente argumentaba que habría beneficio para 79 municipios de la región, pero debido a que no hubo un proyecto carretero integrador a nivel de micro regiones, los únicos municipios presuntamente beneficiados son aquellos por donde actualmente cruzan las vías del ferrocarril y las carreteras a las que se les ha dado mantenimiento, y  son los siguientes: Coatzacoalcos, Cosoleacaque, Soconusco Chinameca, Oteapan, Minatitlán, Acayucan, Jáltipan, Texistepec, Oluta, Sayula de Alemán, San Juan Evangelista y Jesús Carranza, del lado de Veracruz;  Matías Romero Avendaño, El Barrio de la Soledad, Asunción Ixtaltepec, San Pedro Comitancillo, San Blas Atempa, Santo Domingo Tehuantepec, Salina Cruz, San Juan Guichicovi, Santa María Petapa, Santa María Mixtequilla, El Espinal, Juchitán de Zaragoza y Ciudad Ixtepec, del lado de Oaxaca; suman 26 municipios en total, considerando ambas entidades federativas.

Otro elemento de análisis es el analfabetismo en la región: en promedio, todos los municipios de esta región del Istmo de Veracruz tienen una tasa de analfabetismo del 8.6%, superior al indicador a nivel nacional que para el año 2021 fue del 4.7%, con valores extremos que superan el 12%, para los casos de Jesus Carranza, San Juan Evangelista, Sayula de Alemán y Texistepec. En el estado de Oaxaca, la tasa de analfabetismo es del 13.3%, y es una de las entidades con niveles más altos del país en este indicador. Para los municipios de esta región, el promedio es de 10.6%, los valores extremos los registran San Blas Atempa y San Juan Guichicovi, con tasas del 23.9% y 28.6% respectivamente.Adicionalmente hay que precisar que uno de los graves fenómenos que lacera a la población de esta región es la pobreza que hay en todos los municipios que, en promedio, es superior al 50% respecto de la población total. Los municipios con mayor situación de pobreza extrema al año 2020 son Sayula y Texistepec con 27.38% y 26.70%, respectivamente; y San Juan Guichicovi y San Blas Atempa con 22.37% y 22.91%,respectivamente.

Es de señalarse que, en esta región, la población de pueblos originarios es más numerosa en el estado de Oaxaca que en Veracruz; por ejemplo, en San Blas Atempa el 97.75% son hogares indígenas, al igual que en San Juan Guichicovi es el 86.49%; en cuanto a Veracruz, esta población se encuentra en porcentajes menores al 15% a excepción del municipio de Sayula de Alemán con 34.57% de población en hogares indígenas. Por su parte en Oteapan y Chinameca son los municipios con más habitantes que se consideran afromexicanos con 15.93% y 16.11%, respectivamente.

No obstante lo antes señalado, es necesario puntualizar que es posible potenciar el desarrollo de todos los municipios mencionados por la federación, e incluso muchos más, sólo si los gobiernos de los estados de Veracruz y Oaxaca integran proyectos estratégicos de inversión complementarios; y se lleven a cabo inversiones estratégicas integrales, por parte de los municipios metropolitanos contiguos, a saber: las Zonas Metropolitanas (ZM) de Coatzacoalcos, Minatitlán y el Área Conurbada de Acayucan, así como las ZM de Tuxtepec, Salina Cruz y Oaxaca. 

En este escenario las universidades públicas de Veracruz y Oaxaca jugarán un papel destacado, solo si se transita del discurso retórico de los rectorados y se realiza una planeación educativa, capacitación, desarrollo tecnológico aplicado a las unidades de producción y si los rectorados echan mano de los especialistas en desarrollo regional que realizan investigación económica sobre Veracruz y Oaxaca. Al momento, desde mi punto de vista, al no haberse involucrado la UV a este gran proyecto, en lugar de estar regresando a Gobierno del Estado cientos de millones de recursos, la Rectoría y su estructura central de primer orden (Secretarías y Direcciones Generales), no solo traicionaron a quienes designaron a su titular, sino también al proyecto de Gobierno Federal y, por supuesto, a los Veracruzanos que, como se argumentó al inicio, en Veracruz se carece de empleos y trabajos bien remunerados: por ello migran.¿Usted qué opina, ha sido traición o es incompetencia?.

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