Agencias/Sociedad 3.0
Este miércoles, fiscales estadounidenses informaron que están en conversaciones con Ismael «El Mayo» Zambada, líder del cártel de Sinaloa, para alcanzar un posible acuerdo de culpabilidad. Zambada, detenido el verano pasado, enfrenta cargos por su participación en actividades delictivas relacionadas con el narcotráfico.
El fiscal federal adjunto Francisco Navarro señaló que, aunque las negociaciones no han tenido avances significativos, esperan continuar explorando opciones. Una audiencia ha sido programada para el próximo 22 de abril.
Durante la sesión judicial, se abordó un posible conflicto de intereses relacionado con el abogado principal de Zambada, Frank Perez, quien también representa a Vicente Zambada, hijo del capo y un posible testigo del gobierno. A pesar del riesgo de conflicto, «El Mayo» manifestó su deseo de que Pérez continúe representándolo, consciente de que podría haber limitaciones en el manejo de información sensible.
Vicente Zambada, quien llegó a un acuerdo de culpabilidad en las acusaciones contra el cártel, podría testificar contra su padre. En el juicio de Joaquín «El Chapo» Guzmán, Vicente describió la operación conjunta de su padre con Guzmán, revelando detalles sobre la corrupción política y rivalidades entre grupos delictivos.
La detención de “El Mayo” desató tensiones dentro del cártel de Sinaloa, provocando enfrentamientos entre facciones leales a Zambada y los llamados «Chapitos», hijos de “El Chapo”. Además, las capturas recientes de Guzmán López y Ovidio Guzmán intensificaron la violencia en México, afectando las relaciones entre México y Estados Unidos.
La reacción del expresidente Andrés Manuel López Obrador y la actual presidenta Claudia Sheinbaum, atribuyendo parte de la responsabilidad a Washington, generó críticas del entonces embajador de EE.UU. en México, Ken Salazar, quien calificó de “incomprensible” culpar a su país por la violencia de los cárteles.
Las acusaciones de falta de cooperación entre México y EE.UU. en la lucha contra el narcotráfico han tensado las relaciones diplomáticas. Mientras tanto, los fiscales estadounidenses siguen buscando acuerdos con figuras clave del cártel para fortalecer sus casos y desmantelar la organización criminal.