De la gama de seis partidos políticos con registro en este país tres han gobernado México y otros tres aún no alcanzan rango de posibles ganadores de la presidencia de la república, son el Verde Ecologista, el Partido del Trabajo y Movimiento Ciudadano. De los que ya han gobernado este país, MORENA es el de más reciente creación (2014), el PAN surgió en 1939 y el PRI (1946) fue producto de una secuencia partidista iniciada en 1929. Estos últimos guardan características muy diferentes, desde la génesis de su fundación hasta las circunstancias que propiciaron ganar la presidencia, sin duda, fueron determinantes. Solo MORENA es la organización política nacida en el siglo XXI, el resto proviene del siglo XX. Al PAN le llevó 61 años hacerse de la presidencia de la república, a MORENA solo cuatro años pues aunque su registro como asociación civil es del 20 de noviembre de 2012 su registro como partido data del 9 de julio de 2014. Respecto del PRI su nacimiento, crecimiento y madurez provienen de metamorfosis originadas por los acomodos de grupos en el poder, emprende su aventura con la creación del Partido Nacional Revolucionario el 4 de marzo de 1929, transformado en Partido de la Revolución Mexicana el 30 de marzo de 1938 para ser convertirse en PRI el 18 de enero de 1946 llevando como candidato presidencial a Miguel Alemán Valdés.
Esa narrativa cronológica en verdad no refleja el contenido real de las circunstancias que dieron origen a esos partidos, porque muchos actores políticos figuraron en su construcción y acarrea inherente la evolución política del pueblo de México. Su narrativa integraría un grueso volumen, pero podemos intentar un compendio sobre las circunstancias de la creación del PRI, del PAN y de MORENA. El PRI y sus antecesores (PNR-PRM) fueron creados desde el poder, en cambio, el PAN y el PRD- MORENA nacieron desde la oposición. El primer impulso fue de Plutarco Elías Calles en un intento por incluir en una sola organización política a caciques y hombres fuertes regionales, todo bajo su control y mando, por supuesto. Tal procedimiento convirtió a Calles en el factor político de unidad y centro del poder que lo capacitó para decidir la candidatura presidencial de Lázaro Cárdenas en 1934. Pero a don Lázaro no gustó eso de ser marioneta de Calles y bajo esa circunstancia para su respaldo transformó el Partido Nacional Revolucionario (PNR) en Partido de la Revolución Mexicana (PRM), y bo fue un simple cambio de siglas porque con esa organización nació el corporativismo político incorporando a sus filas colectivamente en sectores a campesino, obreros, militares y un sector popular. El PRM postuló la candidatura de Manuel Ávila Camacho, quien a su vez, en 1946 ya habiendo postulado el PRM a Miguel Alemán para la presidencia de la república, lo convierte en Partido Revolucionario Institucional. Para ese entonces, en 1939 ya había sido fundado el Partido Acción Nacional, como un partido opositor a ciertas tendencias y “desviaciones” del régimen nacido de la Revolución Mexicana, también como respuesta a políticas de tendencia “socialistas”. Manuel Gómez Morín impulsó la creación de este partido, no era una idea nueva en su ideario político porque desde 1928 había escrito a José Vasconcelos su intención de crear un partido político que definiera los propósitos de la Revolución Mexicana y no estaba de acuerdo en la forma en cómo se desarrollaban las acciones gubernamentales. El PAN ha sido una organización política de lucha oposicionista por excelencia, de “derecha”, #conservador”, como fuere ha sido un partido resistente a las derrotas, curtido por la adversidad, persistente pese a sus graves crisis internas, con ese bagaje de frustraciones llegó a la presidencia de la república en el año 2000, 61 años después de haber sido creado. Ahora, vuelto a la oposición, por ahora no se le advierten los insumos suficientes para convertirse en lo inmediato en un partido competitivo nuevamente. El PRD también nació desde la oposición en 1989, ubicado en el ángulo izquierdo de la geometría política de este país en apenas diez años alcanzó algunas gubernaturas estatales y la del Distrito Federal, se le estimaba como un partido cuya inercia beligerante lo llevaría pronto a la presidencia de la república, quizás por errónea estrategia no fue así y el PAN se le adelantó en el 2000. Hemos sido testigos de cómo el grupo de Los Chuchos utilizó al PRD como franquicia para fortalecerse y transitar hacia los pasillos del poder gracias a las canonjías partidistas, esa actitud “negociadora” motivó la salida de López Obrador del Partido de la Revolución Democrática para crear el Movimiento de Regeneración Nacional en 2012 que culminó con la creación de MORENA partido en 2014. La salida de AMLO del PRD provocó una fuerte sangría en el PRD porque con él emigraron a MORENA los mejores cuadros perredistas, de allí el debilitamiento del partido del Sol Azteca y su consecuente desaparición del mapa político nacional. En una marcha extraordinariamente vertiginosa MORENA alcanzó la presidencia de México en 2018 y rtefrendó el triunfo en 2024. Así la historia.