Los seis partidos políticos que participan en los procesos electorales de este año en Durango y Veracruz son el PAN, PRI, Pt, Verde Ecologista, MC y MORENA, aunque en realidad la competencia será bastante asimétrica porque es MORENA el partido que domina la escena electoral en este país. En consultas de opinión recientemente aplicadas en ambas entidades, relativas al potencial de cada partido el PRI será el menos favorecido por la voluntad ciudadana y en el cotejo será el Partido Acción Nacional más protagonista, pero con reducida fuerza competitiva para hacerle mella al partido en el gobierno, cuyo fuselaje es apoyado por el Verde Ecologista y el Partido del Trabajo ya para dispersar el voto opositor o bien para abultar el número de votos a favor. En la entidad veracruzana podemos advertir el gran esfuerzo que despliegan Movimiento Ciudadano y el PRI para integrar sus respectivas planillas edilicias y se dude de su capacidad para presentarlas en los 212 municipios de la entidad, y sí así fuere, las más sin ninguna oportunidad para competir electoralmente. Tampoco en la alianza de partidos oficialista se observa, a parte de MORENA, mucha convocatoria ciudadana, pues el Verde y el PT requieren de esa alianza para seguir subsistiendo en las nóminas del INE y del OPLE. El Partido del Trabajo, por razones de estrategia electoral no conformó en Veracruz alianza con MORENA y el Verde, irá en solitario, esa circunstancia dará oportunidad para comprobar su genuino acontecer de partido político con merecimientos para seguir gozando de las prerrogativas partidistas y su nomenclatura de seguir usufructuando las canonjías del poder.A MORENA le sobran candidatos, y por la parte antagónica lo que se vio el fin de semana anterior fue que en el PAN se concentró buena parte de la opción opositora y han sido numerosas las solicitudes de registro de candidaturas. A finales del mes en curso podremos observar si en el PRI habrá similar entusiasmo para conseguir candidaturas, no soslayamos que la sangría en este partido comenzó hace ya algunos años, cuando muchos de sus cuadros, tal cual sucedió con el PRD, han emigrado hacia MORENA, previa escala en el Verde. De cualquier manera, el hecho de no fraguar una alianza opositora da como resultado un voto opositor fragmentado y por ende un voto útil que no suma. Difíciles son las circunstancias para la causa opositora, pero son tiempos de coyuntura, cuando es posible el surgimiento de nuevos cuadros políticos que encabecen la inconformidad para combatir el estatus instalado por MORENA. No se olvide que el ejercicio del poder desgasta en mayor o menor medida a quien lo ostenta, así sucedió con el PRI, igual ocurrirá a MORENA. Es la lucha de los contrarios, siempre necesaria para alcanzar lo nuevo. Tal es la dialéctica política.