Agencias/Sociedad 3.0
El exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, es investigado por la Fiscalía General de la República (FGR) por presuntos delitos de desvío de recursos, enriquecimiento ilícito, lavado de dinero, uso de recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa durante su administración. De acuerdo con el actual gobernador de la entidad, Alfredo Ramírez Bedolla, existe una orden de aprehensión en su contra, pero Aureoles se encuentra prófugo.
En entrevista con Luis Cárdenas, Ramírez Bedolla detalló que la FGR lleva tres años investigando un «gran desfalco» que dejó a Michoacán en una «quiebra técnica». «Es un caso de corrupción. La fiscalía está ya en la certeza de que hay delitos que perseguir y busca cumplir la orden de aprehensión», afirmó el mandatario estatal.
Acusaciones contra Aureoles
El gobernador Ramírez Bedolla señaló que la investigación se centra en presuntos actos de corrupción que habrían ocurrido durante la administración de Aureoles, quien gobernó Michoacán de 2015 a 2021. Entre los delitos que se le imputan destacan:
- Desvío de recursos: Presunta malversación de fondos públicos.
- Enriquecimiento ilícito: Incremento injustificado de su patrimonio durante su mandato.
- Lavado de dinero: Uso de operaciones financieras para ocultar el origen ilícito de recursos.
- Asociación delictuosa: Colaboración con grupos o individuos para cometer actos ilícitos.
Negación de persecución política
Ramírez Bedolla negó que la investigación y la orden de aprehensión en contra de Aureoles sean motivadas por razones políticas, como lo ha señalado la oposición. «No es persecución política. Es un caso de corrupción que se está investigando con base en evidencias», aseguró.
El gobernador también destacó los avances en la lucha contra la delincuencia y la recuperación económica de Michoacán bajo su administración. «Combatimos la extorsión… Hemos avanzado mucho… Hemos sacado a Michoacán de la quiebra técnica… Ahora sí se combate a la delincuencia organizada. Nos dejaron un estado en desastre», afirmó.
La investigación contra Aureoles forma parte de los esfuerzos del gobierno federal y estatal para combatir la corrupción y recuperar recursos desviados. La FGR ha recopilado evidencias que, según Ramírez Bedolla, son suficientes para proceder legalmente en su contra.
Mientras tanto, Silvano Aureoles no se ha pronunciado públicamente sobre la orden de aprehensión en su contra. Su paradero actual es desconocido, y las autoridades continúan con las labores de localización para cumplir con la orden judicial.
Este caso ha generado reacciones encontradas en el ámbito político. Mientras algunos sectores apoyan la investigación como un paso necesario para combatir la impunidad, otros lo ven como un acto de persecución contra figuras de la oposición. Sin embargo, el gobierno de Michoacán insiste en que se trata de un proceso legal basado en evidencias y no en intereses políticos.
Se espera que en los próximos días se brinden más detalles sobre el desarrollo de la investigación y los esfuerzos para localizar y detener a Silvano Aureoles.