La nota de CRÓNICA, que el 28 de marzo de 2025, aparece firmada por Anamari Gomis, describe muy bien el acecho que en estos momentos vive la Universidad Nacional Autónoma de México.
La Juez Cuarto de lo Civil de la Ciudad de México, Flor María Hernández Mijangos, estimó que la difusión de la conducta y las declaraciones de quienes encabezaban la UNAM y la FES Aragón, afectaron a la profesora que dirigió la tésis de la ministra de la suprema corte de justicia de la nación, que fue ungida no obstante descubrirse que su tésis profesional se la plagió en 1986 a Edgar Ulises Baez, ambas tesis dirigidas por la profesora Martha Rodríguez Ortíz, quien en 40 años asesoró a 500 alumnos que aspiraban a una licenciatura, haciendo un promedio de aproximadamente 12 tésis por año, encontrando otros casos similares.
En flagrante violación de la autonomía de la UNAM, un Tribunal Colegiado, hace casi dos años ordenó que el Comité Universitario de Ética de la UNAM diera a conocer su dictamen sobre la tésis.
A raíz de este hecho bochornoso que lastima a la Máxima Casa de Estudios de México, fue rescindido el contrato a la profesora Martha Rodríguez Ortíz, por lo que la licenciada Rodríguez Ortíz, » presentó y ganó una demanda por daño moral» contra el Doctor Enrique Graue, ex rector de la UNAM y el maestro Fernando Macedo, ex director de la FES Aragón, que ahora se resuelve a favor de quién hizo posible esos plagios, condenando a pagar 15 millones a cada uno, bajo el argumento de enmendar el daño que causó dar a conocer estás violaciones a las normas internas de la institución, en total contrariedad a su Ley Orgánica, que la autoriza a organizarse sin intervención de ninguna ajena y que su vida la determinen sus órganos de gobierno.
No, la UNAM nunca ha pretendido ser un Estado aparte o un Estado dentro de un Estado. Pocos saben que, como dice Julio Jiménez Rueda, la autonomía se dió contra la opinión de la mayoría de su comunidad. La izquierda pensaba que el Estado quería dejarla a la deriva y la derecha, en nombre de la libertad de cátedra ( concepción diferente a la sudaméricana), quería distraerla al Estado para imponerle sus visiones del mundo.
La UNAM , a lo largo de su historia ha sido objeto de muchas agresiones. Las tesis del autogobierno, la propuestas de paridad en la integración de sus órganos. La desaparición de las FUSAS, los que reclamaban la paternidad del movimiento del 68, los movimientos del CEU, las caídas del doctor Chávez, del doctor González Casanova, del doctor Carpizo, las bandas del Muro, de GUIA, las prepas populares…pero sin duda alguna que Morena tiene clavada la espina desde que dio a conocer que su patriarca no pudo hacer la carrera de ciencias políticas en catorce años, resignandose a ser un fósil.
Cuando Andrés Manuel López Obrador, llega en 2018 a la presidencia, lo primero que se propone es cobrarle a la UNAM, haberlo reprobado constantemente y condenarlo a la política cuatrera, empezando por presionarla para que sus autoridades supriman el exámen de admisión y establezcan el pase automático. Cualquier izquierdista sabe que la alteración de la cantidad altera irremediablemente la calidad. No es lo mismo impartir clases a un grupo de 30 que a uno de 60.
Claro que no es la UNAM, la única institución que Morena quiere condenar a la mediocridad. Ha perseguido por igual a la Universidad Pedagógica, al CIDE, al Politécnico le quitó el Centro de Investigación y Estudios Avanzados, lo despojó de la Comisión de Actividades Deportivas y Académicas y así todas las instituciones educativas del Estado,
Lo dijo muy claro. No quiere a los que estudian una profesión, porque son desleales a Morena. Únicamente cree y apuesta por los frustrados, amargados y mediocres.
Los Morenistas son incapaces de entender que la educación aquí y donde quiera es elitista, como lo es el deporte. En uno como en otro no todos pueden ser campeones. La gloria no se alcanza necesariamente con títulos. Necesitamos abrir oportunidades a todos los niveles, pero siempre se va a incentivar para el triunfo. En mis tiempos era un orgullo ser becado, hoy no existe ese orgullo, porque las becas se las dan a todos.
Al triunfo de la Revolución rusa, Lenin, dijo que en tiempos de paz y de construcción, un técnico vale mil veces más que un revolucionario. Pero Morena no puede entender eso porque no es de izquierda. Ella solo quiere destruir la República y lo mejor de ella, que es la educación universitaria.
La absurda resolución contra el Doctor Graue y el maestro Fernando Macedo, no sólo destruye la autonomía de la UNAM sino que con esa figura jurídica de reparación de daño moral, se pone una pistola en la sien de todo aquél que prefiera hablar libremente al silencio de los cómplices del saqueo y la destrucción morenista.
