Investigador especialista en neurobiología, fundador del Instituto de Investigaciones Cerebrales de la Universidad Veracruzana, Jorge Manzo Denes explica por qué en una tercera ocasión aspira a convertirse en Rector de esa casa de Estudios.
Nacido en Unión Hidalgo, en la zona zapoteca de Oaxaca, este científico emigró desde muy pequeño al municipio de Agua Dulce, en el sur de Veracruz, donde cursó toda su formación académica previa a la licenciatura en Biología, que obtuvo en Xalapa, en 1985, en la propia UV.
Durante tres años trabajó haciendo investigaciones con los primates de las islas de la Laguna de Catemaco; obtuvo su título de maestría en Tlaxcala y su doctorado en Ciencias Biomédicas por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Manzo presume sin modestia que su único patrón empleador ha sido la Universidad Veracruzana, en la que durante poco más de 32 años ha desarrollado su pasión por la ciencia. “Soy científico”, dice con orgullo y comenta que es miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.
Moderado en sus comentarios, a veces excesivamente cuidadoso y evitando criticar a las actuales y las anteriores autoridades universitarias, dice que en cada oportunidad ha elaborado proyectos concretos para obtener la aprobación de los miembros de la Junta de Gobierno cuya responsabilidad es designar al rector, en periodos de cuatro años con posibilidad de una reelección.

Investigador nivel III del Sistema Nacional de Investigadores (la máximo categoría a que se puede aspirar), afirma con orgullo que los últimos 20 años de su vida los ha dedicado con pasión al autismo, generando nueva información médica y biomédica que considera útil para la sociedad.
Afirma que su interes por gobernar a la UV nace de una revisión detallada que ha realizado a la normatividad interna de esa casa de estudios, en la que encuentra fallos, duplicidades, vacíos y lagunas que es necesario corregir. Al respecto, pone por ejemplo que es la única universidad en México regulada por dos leyes diferentes, la de autonomía universitaria y la ley orgánica. El aspirante a Rector dice que es necesario armonizar y corregir el marco reglamentario para mejorar las condiciones de la universidad.
Manzo Denes asegura que muchos de los procesos universitarios carecen de certeza y que desde hace tiempo viene pugnando por un nuevo paradigma; en esta ocasión plantea como retos prioritarios la avalancha de la inteligencia artificial y la urgencia de admitir a un mayor número de estudiantes que desean realizar sus estudios superiores en la Veracruzana. También se refirió a la necesidad de trabajar en el desarrollo de competencias y habilidades de los estudiantes, pero no abundó al respecto.
Reconoció que se debe incrementar la matrícula, dado que actualmente seis de cada diez aspirantes no logran su acceso a la Universidad. Se negó a llamarlos “rechazados” y dijo que simplemente es un asunto de capacidad: no es posible en las actuales circunstancias darles formación universitaria a todos. Aseguró que 27% de los jóvenes veracruzanos en edad universitaria son atendidos por la UV.
El aspirante a rector dijo que no sólo hay que incrementar el número de egresados que finalizan sus estudios, sino mejorar la eficiencia terminal, que es la posibilidad de que los universitarios se incorporen rápidamente y sin obstáculos a las actividades productivas remuneradas.
Cuestionado por Sociedad 3.0, el doctor Jorge Manzo Denes se negó a pronunciarse sobre la inequidad del subsidido federal a la UV, respecto de otras entidades federativas y universidades. Dijo que es indispensable optimizar el uso de los recursos disponibles y transparentarlos, a la vez de obtener otras fuentes de financiamiento.
No quiso hablar sobre el número de empleados de la Universidad. Respecto de los actuales retos de la UV, dijo que: “por eso trata de hacer un cambio profundo en la Institución, efectivamente”, y también que “ciertamente hay muchos retos, pero también hay muchas fortalezas y áreas de oportunidad”.
Respecto de la vinculación de la universidad con la sociedad, reconoció que dicha vinculación “ha venido rezagándose un poco”. Insistió en la necesidad de incrementar los modelos híbridos con el uso de tecnologías, para enfrentar exitosamente los retos universitarios.
Manzo Denes informó que está “amasando” el proyecto que pronto “horneará” para ponerlo a consideración de la comunidad universitaria y de la Junta de Gobierno, que habrá de decidir si ratifica por cuatro años más al actual Rector, o se inclina por otro perfil.
Finalmente, el neurocientífico dijo que en las dos ocasiones anteriores en que ha participado, logró formar parte de las ternas finales de aspirantes. Confía en que en esta ocasión, su proyecto le permita convertirse en Rector de la Universidad Veracruzana.