Ayer sábado se cumplieron cuatro años del colapso del tramo elevado de la Línea 12 del Metro entre las estaciones Olivos y Tezonco de Ciudad de México, un accidente que mató a 26 personas, dejó decenas de heridos y provocó numerosas discapacidades graves, físicas y mentales, desintegró familias y dejó a menores vulnerables en condición de mayor desamparo

El tema no sólo NO ha sido aclarado en beneficio de la justicia y la reparación a las víctimas, sino que se ha utilizado como botín político en feroces disputas de grupos de poder.
En el pasado reciente, en el proceso de elección interna de MORENA para su candidato a la Presidencia, los equipos de Claudia Sheimbaum (Jefa de Gobierno de la Ciudad en el momento del siniestro) y Marcelo Ebrard (Jefe de Gobierno durante el diseño y construcción del transporte) se culpaban mutuamente y se lanzaban agresiones: que si el diseño y la construcción fueron erróneos, que si el trazo de la línea fue cambiado de último momento.
Ayer, ARISTEGUI NOTICIAS hizo pública una feroz campaña soterrada de TELEVISA para responsabilizar a CARLOS SLIM del siniestro, puesto que sus empresas constructoras fueron las principales constructoras de la línea doce del metro.
Para muchos, esta acción de TELEVISA representa la mayor traición y carencia de principios en el ámbito empresarial mexicano, ya que durante mucho tiempo SLIM ha respaldado a la televisora e incluso a través de su banco, INBURSA, ha financiado al grupo de Emilio Azcárraga Jean, quien actualmente se encuentra formalmente separado del consejo de la empresa, para “permitir” las investigaciones sobre supuestos actos de corrupción en la comercialización de los derechos de transmisión de la Federación Internacional de Futbol, lo que significa irregularidades y transacciones ilícitas por cientos de millones de dólares. Incluso, fue gracias a CARLOS SLIM que EMILIO AZCÁRRAGA logró recuperar el control accionario de la empresa fundada por su abuelo.

En cuanto al accidente de la línea doce del metro en CDMX, los familiares de muertos y heridos reconocen apoyos sociales por parte de las autoridades, sin embargo, todos manifiestan que sus vidas cambiaron para mal, pues prácticamente la totalidad de ellos viven con más dificultades y carencias que antes del siniestro.
En 2021, la Fiscalía de Ciudad de México anunció que solicitaría a un juez el inicio de la acción penal contra diez personas, todos ellos funcionarios técnicos que de alguna manera participaron en el diseño y supervisión de la línea; en ese momento también se dijo que se imputaría a Miguel Ángel Mancera, ex Jefe de Gobierno de Ciudad de México, precisamente quien ocupó el cargo entre Ebrard y Sheimbaum, y dos ex directores del METRO: Jorge Gaviño y Jorge Jiménez Alcaraz.

Las conclusiones de la Fiscalía, entonces a cargo de Ernestina Godoy (actualmente Consejera Jurídica de la Presidencia de la República), eran absolutamente inculpatorias del Gobierno de Marcelo Ebrard, por supuestos fallos en la construcción, sin embargo, tres de los cuatro peritajes externos responsabilizaban directamente a la administración de Claudia Sheimbaum, debido a la falta de mantenimiento y supervisión.

El Diario EL PAÍS afirma que: “Tres de los cuatro peritajes externos contratados por la Fiscalía de Ciudad de México para analizar las causas del colapso de la Línea 12 del metro reportan fallas en el mantenimiento y la inspección de la estructura. Los documentos, a los que ha tenido acceso EL PAÍS, destacan como causas del derrumbe problemas en el diseño de la obra y la construcción, pero apuntan a una inexistencia de revisiones de la línea, que debían realizarse de manera periódica, y deficiencias en el manual de mantenimiento, que no detallaba cómo tenían que hacerse esos controles. En línea con el último informe de la consultora noruega Det Norske Veritas (DNV), los peritajes de la Fiscalía aseguran que no hay registro de que se haya hecho ninguna evaluación detallada de la obra desde su inauguración en 2012 hasta la caída del puente el 3 de mayo de 2021…”
De manera imprevista, el Gobierno de Ciudad de México canceló el contrato con la consultora noruega, cuyos reportes eran desfavorables a los precandidatos presidenciales, pero especialmente a Claudia Sheimbaum, ya que la principal causa del siniestro fue la carencia de supervisión y mantenimiento, según el reporte de los nórdicos.
En cuanto a los proveedores privados, numerosos reportes afirmaron que materiales utilizados, como ciertos pernos, por mal diseño y colocación, también fueron parte del siniestro. Pero ni se hicieron efectivas fianzas ni se procesó legalmente a los propietarios, directivos ni técnicos de los contratistas.
Este fin de semana, LATINUS reveló grabaciones de reuniones entre la entonces Jefa de Gobierno de CDMX, Claudia Sheimbaum, colaboradores de su Gobierno y peritos, en los que fue advertida de que si los trenes no substituyen, es altamente probable la repetición de una catástrofe. Ella responde enfática que no, que no «tiene dinero ni tiempo para hacerlo», dando prioridad a su proyecto político presidencial que a la seguridad de los usuarios:
Es muy importante dejar en claro que Actualmente, no hay personas en prisión por el colapso de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México. Aunque la Fiscalía General de Justicia de la CDMX presentó cargos contra 10 exfuncionarios en diciembre de 2021, el caso aún sigue pendiente y no hay detenidos ni sentenciados.
Sheimbaum ocupa la Presidencia de la República y Ebrard la Secretaría de Economía del Gobierno Federal. Las constructoras tampoco han respondido respecto de las imputaciones que les fueron hechas como corresponsables.
Los familiares de los muertos recibieron indemnizaciones por importe de 650 mil pesos cada una y un millón adicional “regalado” por el Gobierno de la entonces Jefa de Gobierno.