En el evento celebrado en Mérida donde presentó su libro su libro “Las Grandes Reformas para el Cambio del Régimen”, el senador Ricardo Monreal nuevamente aseguró que buscará la candidatura a la presidencia de México por su partido, Morena. Esa reiterada insistencia de Monreal no es nueva, tampoco extraña, lo curioso radica en haberlo declarado ante militantes de los tres partidos de oposición que integran la “Coalición Por México”, presentes también senadores del PRI (organizadores del acto), del PAN y del PRD, también de Morena. Una declaración ante un público de convicciones diversas no debiera extrañarnos cuando creemos en las bondades del pluralismo, pues ninguna unanimidad está exenta de “sospechosismo”. Pero Monreal al igual que sus pares saben bien a lo que juegan, este no es un salto de Monreal al vació, debe inferirse que ha medido sus consecuencias y la reacción de quienes en Morena lo están monitoreando. La estrategia es un elemento de vital importancia en la operación política, bien diseñada y mejor implementada acarrea el éxito. De allí que, para conocer los efectos de este movimiento del ajedrez político debamos esperar las respuestas ya en discurso, ya en movimiento de piezas. Empero, es obvio que Monreal camina al filo de la navaja, por lo cual, cualesquiera de sus movimientos deben ser cuidadosamente calculados. Poco vivirá quien no se entere del próximo movimiento.