v 20 mil aspirantes a ingresar a la UV no aprobaron el examen
v Los formatos de Educación Superior no responden al mercado
v Egresados se topan con la triste realidad del desempleo
Por Miguel Angel Cristiani Gonzalez
A los más de 20 mil aspirantes a ingresar a la Universidad Veracruzana UV que no pasaron en el examen de ingreso, a manera de consuelo, alguien debería de decirles que los formatos de Educación Superior no responden a demandas del mercado, es decir que luego de varios años de estudio y obtener un título profesional, pues se van a encontrar con la triste realidad de que no encuentran empleo.
Desde hace ya muuuuchos años, el problema del aumento de la matrícula de aspirantes a cursar una carrera en la Universidad Veracruzana y aunque se hacen -como lo harán ahora nuevamente- las famosas listas de corrimiento no resuelven el problema.
Aunque el actual rector -por obra y gracia de la Junta de Gobierno- Martín Aguilar Sánchez ha declarado en reiteradas ocasiones que “ya se trabaja en el tema” lo cierto es que hasta el momento no se han anunciado medidas que permitan pensar que las distintas carreras y sobre todo las de mayor demanda, están respondiendo a las demandas del mercado.
De los 39 mil 336 aspirantes que presentaron el examen de admisión al ciclo escolar agosto 2022 – enero 2023, de nivel Licenciatura o Técnico Superior Universitario, sólo 17 mil obtuvieron derecho a inscripción, en las carreras con mayor demanda.
La triste realidad es que 8 de cada 10 profesionales de las áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas creen que las metodologías tradicionales, no son las más adecuadas para abordar las necesidades competitivas del mercado, ni los cambios tecnológicos de la región.
En un mundo global y cambiante, la capacitación en estudios superiores es una herramienta clave para sostener las ventajas competitivas de las empresas y responder a las necesidades del mercado en medio de contexto de la post pandemia. En la Universidad este mecanismo de enseñanza tradicional, que debería generar mayores oportunidades laborales hacia el futuro, parece tener vacíos en sus metodologías de formación.
De acuerdo con un estudio reciente, en América Latina y el Caribe 8 de cada 10 de profesionales encuestados (82,86 por ciento) creen que los formatos educativos tradicionalmente empleados por las instituciones de educación superior no son los más adecuados para abordar las demandas del mercado laboral y asumir los cambios de tipo tecnológico.
Con los resultados obtenidos nos estamos dado cuenta de que la educación tradicional no está respondiendo a las demandas del mercado. Cada vez es más amplia la brecha entre las necesidades educativas y el mundo universitario, al seguir anclado en el siglo XX. Con la transformación digital, la formación online está consolidada. Los estudios hechos en la post pandemia nos indican que muchos profesionales consideran que este tipo de formación está más alineada con sus conocimientos y se adapta mejor a sus necesidades.
Nadie tiene duda de los beneficios que ofrece la formación virtual. Transmiten conocimientos a los profesionales que no necesitan estar en un sitio concreto. Se adapta a sus periodos de tiempo y las metodologías empleadas están mejor desarrolladas para explicar conceptos completos en las áreas.
Es en estos campos donde más posiciones se van a aglutinar en el futuro, y es ahí donde los expertos prevén la revolución de la Big Data, la realidad virtual, la realidad aumentada, la bioinformática y la inteligencia artificial. Las carreras STEM son importantes para transformar la realidad. Ofrecer respuestas a las necesidades de las empresas y preparar a los profesionales para que se enfrenten a las exigencias del mercado y las nuevas tecnologías, debe ser una de las premisas de la educación superior.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación de desarrollo Económico (OCDE), para el año 2030 el 80 por ciento de los empleos en América Latina y el Caribe serán reemplazados por carreras STEM, las cuales podrán brindar las habilidades necesarias en grandes empresas, de modo que se apalanque el desarrollo económico de la región.
El Banco Interamericano de Desarrollo, BID, estableció en su estudio sobre análisis del mercado laboral que «uno de los principales problemas en la contratación, es la dificultad en encontrar trabajadores con las habilidades requeridas. En las grandes ciudades, los empleadores reportaron dificultades para encontrar trabajadores con habilidades de conocimiento (34 por ciento), y habilidades especificas (12 por ciento).
Estamos viviendo una crisis importante que se demuestra en las tasas de desempleo. Lo curioso es que muchas empresas sacan posiciones que no se cubren porque no hay profesionales capacitados o alineados con las necesidades de las empresas. Una persona puede tener conocimientos en ingeniería química de hormigón, y a lo mejor no tener trabajo por la falta de especialización. Las empresas se encuentran con gente capacitada de forma poco adecuada a la realidad de lo que se necesita. Una maestría, a través de formación On Line, no solo permite ganar más dinero, encontrar trabajo o aportar al desarrollo del país, sino que ayuda para que el profesional se adapte sus tiempos con mayor facilidad a los formatos de educación.