Sin pasar por alto, que mal está el señor Presidente, cuando hasta lo que no come le hace daño. Síntoma clínico de una persona que ya está mal. Hay quienes hasta el agua les da agruras. Es terriblemente desgastante convivir con un enfermo. Son demandantes e insoportables…
Si para dedicarse a la salud hay que tener vocación; para convivir con un enfermo -crónicos o agudos, da igual- hay que tener estómago. Y paciencia; muuucha paciencia…
Ahora resulta que en su abominable, insufrible, detestable, repelente y lo que le sigue, de sus costosísimas y repetitivas mañaneras, el señor Presidente se queja de que los diarios no le dan cobertura al juicio de Genaro García Luna…
Pues ¡vaya! con el hombre más enterado de México. Qué no todos estemos pendientes para ver a qué horas embarran a Calderón, no quiere decir que no se le ponga atención. Pero se le pasó que hay quienes han enviado corresponsales y le dan cobertura minuto a minuto de lo que sucede en NY. Hasta revelan cómo van vestidos…
Y no digo cuales medios son, porque se le puede ocurrir que también son Traidores a la Patria, como los diputados que votaron en contra de sus mafufadas…
Por cierto, que después de dejar el cargo, García Luna vivió discretamente y nadie se ocupaba de él; hasta que, inesperadamente, fue detenido en EE.UU. a donde iba y venía como por su casa. Y ahora resulta que hay carpetas y carpetas de investigación en su contra. ¡Qué cosas!…
Algo parecido a lo que le sucedió al General Cienfuegos. Del que, dicho sea, solo de paso, no se ha vuelto a saber nada, absolutamente nada. Pero hay quienes aseguran y lo dan por hecho, que nunca más va a volver a EE.UU. Pero regresemos con las mañaneras peleoneras, porque al General lo absolvieron de todo…
Serénese don Manuelito, le puede hacer daño y nada va a ganar con quejarse y hacerle caso a un delincuente que salta en el tiempo, pues dice que estuvo en sitios que todavía no existían; como la película del Viaje en el Tiempo, o la tesis de la Ministra Yasmín Escalante, que también se adelantó a los hechos. Más o menos…
No haga berrinches. En una de esas le vuelve a dar un patatús, como el que ya le dio, que fue a dar hasta el Hospital Militar. No se la juegue haciendo corajes. Ora aguántese como los meros machos…
Cuando menos hasta que vea que su 4T se derrumba. No hay que ser egoísta, Usted ya la gozó, ahora les toca a los conservadores regocijarse con su debacle…
Aunque no se deja de entender, que. habiendo llegado a donde llegó, el desaparecer de la escena repentinamente, lo transformaría en mártir. Y ya sin Usted, se justificaría el derrumbe de su proyectazo…
Así que no se nos raje don Manuelito. Usté puede. ¡Me canso ganso!
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.