Agencias/ Sociedad 3.0
El arzobispo de Tulancingo, Hidalgo, Domingo Díaz Martínez, pidió al gobierno que tome en cuenta a los sacerdotes en el plan de vacunación contra el COVID-19 debido al incremento de contagios y fallecimientos que se han presentado en este sector.
Informó que solicitó a la Secretaría de Salud que se les tome en cuenta para la aplicación de la vacuna porque están en contacto con enfermos y aunque realizan en algunos lugares misa con bajo aforo, están expuestos al virus.
En su caso, informó que se contagió en octubre del año pasado y ante la reflexión de lo que causa la enfermedad, hizo un llamado a quedarse en casa y respetar las medidas sanitarias.
Con información de Milenio