jueves, diciembre 26, 2024

Falleció Beatriz Barba, la primera arqueóloga titulada en México

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Agencias/Sociedad 3.0

Este viernes 29 de enero de 2021 falleció Beatriz Barba Ahuatzin, quien fuera la primera mujer en obtener el título de arqueóloga en México, en los años 50, en la Escuela Nacional de Antropología Historia (ENAH). y que fue figura clave de la arqueología, antropología, etnografía y museología de México, señaló el INAH al lamentar su deceso.

“Murió Beatriz Barba, primera mujer titulada como arqueóloga en México, fundadora de la Academia Mexicana de Ciencias Antropológicas. Prolífica y generosa maestra de muchas generaciones, fue columna de las instituciones en las que participó”, dijo la secretaria de Cultura Alejandra Frausto Guerrero.

La comunidad de arqueólogos y antropólogos de México expresó su pesar a través de las redes sociales por el fallecimiento de la maestra en Ciencias Antropológicas y doctora en Antropología por la UNAM e investigadora emérita del INAH.

Entre los mensajes destacados se lee el del arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, también investigador emérito del INAH y miembro de El Colegio Nacional: “Lamentable noticia. Beatriz fue mi maestra en 1959. Su tesis fue motivo de conocimiento acerca del sitio de Tlapacoya. Envío a sus familiares y al INAH mis condolencias”.

Asimismo, el del arqueólogo Leonardo López Luján, director del Proyecto Templo Mayor: “Tiempos aciagos para la arqueología mexicana, ha fallecido otra de las grandes figuras del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Profesora emérita, fue una de las primeras científicas profesionales en trabajar en nuestro país. QEPD”, escribió el también integrante de El Colegio Nacional.

También la UNAM se unió en Twitter a las condolencias por la doctora Barba: “Profesora emérita de la #ENAH, Beatriz Barba fue la primera mujer en graduarse como arqueóloga en México y una de las más grandes investigadoras en iconografía y religiones. Lamentamos su muerte”, escribió Cultura UNAM.

Origen y trayectoria

Originaria de Jalisco, Beatriz Barba Ahuatzin (1928-2021) fue una mujer que siendo profesora normalista decidió desafiar las reglas sociales de la década de los años 50 y las normas conservadoras de su familia, para ponerse pantalones, salir a campo acompañada de hombres y convertirse en la primera arqueóloga titulada en México, en 1955.

Su carrera la desarrolló en Tlapacoya y Tlatilco, en el Estado de México, así como en el Valle de Guadalupe, en Jalisco; además participó en la planeación del Museo Nacional de Antropología, y en la conservación del edificio de Moneda 13 como espacio museístico, donde hoy

se hospeda el Museo Nacional de las Culturas, entre otros proyectos destacados.

En septiembre de 2019, el INAH entregó a Beatriz Barba la presea del Guerrero Águila, que se otorga a investigadores de la institución por su antigüedad y méritos, y donde además se le reconoció como fundadora de la Academia Mexicana de Ciencias Antropológicas.

Foto: Archivo Familiar de Beatriz Barba

En esa ocasión, Diego Prieto Hernández, director general del INAH, apuntó que “durante décadas, el INAH se ha nutrido del trabajo, sensibilidad, temperamento y creatividad de Beatriz Barba Ahuatzin”. Prieto destacó la imaginación de la antropóloga Beatriz Barba en los albores de los años 60, para, junto con el entonces director del INAH, Eusebio Dávalos Hurtado, y el jurista Julio César Olivé Negrete, conseguir que el INAH mantuviera bajo su cuidado y posesión el inmueble de la calle de Moneda N° 13, pues al trasladarse el Museo Nacional de Antropología a Chapultepec, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público intentó recuperar ese espacio aledaño a Palacio Nacional.

“Gracias a sus oficios, la cuna de la antropología mexicana, el lugar donde surgió el Museo Nacional, el cual después fue el Museo Nacional de Arqueología, Historia y Etnología, luego el Museo Nacional de Antropología, y ahora el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, hoy

mantiene su vocación cultural”, señaló el antropólogo Prieto Hernández.

Su tesis de licenciatura “Tlapacoya, un sitio preclásico en transición” fue sólo el primer paso de una inagotable carrera entregada a la investigación y la conservación de la herencia cultural del pasado y presente de México.

Con una amplia trayectoria en la arqueología, antropología, etnografía y la museología, por citar sólo algunas de las disciplinas en las que incursionó, Beatriz Barba, quien se casó con el connotado arqueólogo Román Piña Chan, investigó además numerosos sitios arqueológicos, entre ellos, Tlatilco y el citado Tlapacoya, en el Estado de México.

Fungió como Secretaria de Organización del Sindicato de Antropólogos del INAH y como Secretaria General de la Asociación Mexicana de Antropólogos Profesionales.

Barba Ahuatzin fue designada en 1962 para, junto con Julio César Olivé, diseñar e instalar la Sala de Introducción a la Antropología del Museo Nacional de Antropología.

La defensa de Moneda

De especial evocación es también el esfuerzo que, en aquel 1964, hizo del inmueble que actualmente ocupa el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, antiguo Museo Nacional, cuyas colecciones fueron enviadas para nutrir al entonces nuevo Museo Nacional de Antropología, en Chapultepec.

La propia investigadora emérita solía referir que, una vez trasladadas las colecciones arqueológicas, el edificio de Moneda No. 13 se encontraba casi vacío, por lo que personal de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público intentó ocuparlo.

Fue entonces cuando investigadores del INAH, entre ellos Beatriz Barba, rellenaron nuevamente las vitrinas con materiales del archivo museístico, a fin de que ese espacio, de vocación cultural desde el siglo XIX, mantuviese su dinámica de investigación, conservación y difusión patrimonial.

Foto: Archivo Familiar de Beatriz Barba

Contactando a diversos coleccionistas, comenzó a delinearse el acervo del Museo Nacional de las Culturas del Mundo, en el cual se desempeñó como subdirectora durante 13 años, a la vez que estuvo a cargo de la Sala de la Cultura China, entre 1972 y 1976.

El vuelo de Ahuatzin

En las décadas de los 70 y 80, abordó estudios sobre la iconografía, las peregrinaciones y las romerías durante la época prehispánica. La producción académica de Beatriz Barba abarcó desde las culturas del mundo, hasta aspectos vinculados con las religiones y las prácticas esotéricas desde una perspectiva crítica

En ocasión del homenaje que se le rindió en 2019, el arqueólogo Eduardo Merlo hizo referencia a la palabra ahuatzin, que alude al segundo apellido de quien fuera su maestra, y con la cual se nombra a un pájaro pescador de las lagunas de Tlaxcala, donde, dijo, es común que la gente todavía diga: “ya vi volar a un ahuatzin”.

-Con información de El Economista

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