viernes, noviembre 15, 2024

Pero poquito…

Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

diariolibertad@gmail.com

A cierta edad, la ingenuidad ya se llama de otra manera.  Y no se dice por el Presidente López Obrador, que de ingenuo no tiene ya nada.  A su edad, y después de tantos años en la brega, sería un pecado ver las cosas color de rosa…

Con la ingenuidad se hace referencia a sus seguidores, a sus fans.  Que está muy bien eso de que le crean a ciegas todo lo que dice -aunque pueden haber serias dudas de que no lo sigan con los ojos vendados; sino por conveniencia-…

Aunque haya evidencias terriblemente contradictorias a su discurso de honestidad, que solo siendo invidente no se pueden ver.  Una de ellas es el caso de su hermano Pío.  Pero hay muchas más igualmente evidentes.  La diputada por Veracruz, Eva Cadena, recibió fajos de billetes para él…

Por lo que hablar de honestidad, como que ya no le queda; y tarde que temprano se lo achacarán.  Además de que hay un refrán que dice “Dime de qué hablas y te digo de lo que careces”…  

Y sin embargo lo siguen; tal vez pensando que un día con otro les toca a ellos dar la cara y algo les queda.  Como aquél Juanito de Iztapalapa que tuvo sus cinco minutos de gloria.  O lo mismo y ya no lo siguen como él cree, ahí están las elecciones de Coahuila e Hidalgo…  

Lo que sí ya es imposible que le crean, es que si desaparece el Instituto Nacional de Acceso a la Información, se compromete -como si su “compromiso” sirviera de algo; ahí está la termoeléctrica de Morelos- a que su Gobierno responderá en 72 horas a las solicitudes de información.  Ajá…    

De recordar que entre sus primeras promesas fue la descentralización de las Dependencias; empezando por la SEP en Puebla.  Y ahora salen con que será para este año -si lo permite el coronavirus- que cumple un centenario de haber sido fundada…

El Presidente quiere que los Organismos Independientes desaparezcan.  Y no para mejorarlos, sino para controlarlos.  Porque si fuera para mejorarlos podría aportar sus ideas y que se aplicaran…

Y qué decir de regresar a los soldados a los cuarteles.  Evaluando su trayectoria, ya no muy se le puede creer.  Aunque eso de que no son iguales, hay que concederle que ciertamente en eso sí tiene toda la razón.  ¡Son los mismos!

Cambiando de tema…

Si alguien quisiera decirle al señor Presidente cómo es que acabaron con la corrupción en China; pues a Lai Xiaomin, de 58 años de edad, un funcionario de alto rango, fue sentenciado a muerte por el delito de corrupción…

O mejor no le digan nada; no vaya a ser que nos quedemos casi sin políticos.  ¡Y luego en época de elecciones!…

También en China sucedió, que en una biblioteca dos robots de esos que andan sobre rueditas y dan información al público.  Que son como un tubo parado con una pantalla y un micrófono para dar y recibir información…

¡Discutieron! porque uno le había pedido a un cliente su Código QR y el otro le hizo ver que había cometido un error, que todavía no era tiempo para pedirlo; que se le habían cuatropeado los cables.  O algo así.  Uno no le entiende al mandarín, pero el tonito y las interrupciones de uno y otro indicaban que era una discusión…

El caso es que se hicieron de palabras “Aunque Usted, no lo crea”.  Hasta que uno, audiblemente enfadado, se dio la media vuelta y dejó al otro hablando solo…

Cualquier ciudadano dirá que con esos ejemplos que ponemos sus creadores, no debería sorprendernos que ellos actuaran así.  Pero el asunto va más a fondo.  Se están creando robots con sentimientos -se molestó- que ya ¡¡razonan!! y actúan fuera de lo programado…

Lo que es una pésima noticia, sobre todo para todos aquellos que han adquirido una de esas robot sexuales, pensando que ya no le van a hacer la plé plé si se van con sus cuates; y peor si van a estar otras robotas y que seguramente por eso no la quiere llevar…

Pero a como van los adelantos tecnológicos -y luego que aprenden tan rápido, pues recién “nacen” ya saben hablar y caminar- no solo se la hará de pleito.  Lo mismo y a falta de progenitora -libre de suegra- al no poder invitarla a casa a que se pase unas vacaciones; lo amenace con suicidarse si se va…

Y que cuando regrese de su sano convivio, la encuentre tirada en el suelo a media sala, con el cable de la corriente en la mano, con el  pelo enmarañado y en una posición ciertamente provocativa.  Como diciendo “mira de lo que te pediste”…

Pero lo mejor del pleito robótico, es que le había pedido al cliente su Código QR, lo que quiere decir que si no te has vacunado, no podrás ir a ninguna parte; y que ya lo tenían programado…

Lo que no se entiende es cómo es que van a vacunar a todos.  Pues cuando vayan terminando de vacunar a los últimos, los primeros ya se habrán muerto y habrán nacido otros tantos, o más…

Por lo que; o se vacunan a todos el mismo día; o los contagios seguirán.  Y como eso no se puede hacer, la humanidad se extinguirá a manos del Coronavichus Apanicatun, sin que apareciera el Anticristo que iba a salvarnos a todos…   

Solo sobrevivirán los robots.  Y habrá que esperar que todo esto sea pronto, para que los metálicos no vayan a aprender nuestras mañas.  Porque es pertinente informar, que ¡ya hay vacunas falsificadas! Que son las que dan reacciones. Las otras también; pero poquito.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.

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