Por lo hasta ahora observado, el partido MORENA no se ha mostrado muy generoso en presentarle a la ciudadanía candidaturas cuyo perfil revele genuinamente el camino hacia un cambio para el bienestar. Eso es notable al revisar sus candidaturas a cargos de elección popular, diseñadas más para conseguir votos que para garantizar administraciones productivas o visión para legislar certeramente. Hay excepciones, como la del senador con licencia Ricardo Ahued, a quien apuntan para la alcaldía de Xalapa, actividad que ya desempeñó con notorio rendimiento durante el trienio 2004-2007. Como candidato, Ahued está avalado por una trayectoria de servicio público intachable y debe suponerse que para aceptar repetir en la alcaldía habrá recibido promesas de suculentos apoyos para sacar a la capital de Veracruz del marasmo en que se encuentra. Acaso no se le dificulte el triunfo al senador Ahued, pero la dificultad empezaría apenas ganando, porque Xalapa requiere solución a sus problemas estructurales: suministro de agua entubada, movilidad urbana, vialidad, equipamiento urbano, medio ambiente etc., la solución a cualquiera de esos expedientes cuesta mucho dinero, alguien, en algún momento, tiene que emprender esa tarea.