Agencias/Sociedad 3.0
Los mandatarios de 12 de los 15 estados que este año renovarán gubernatura no lograron hacer frente a la incidencia delictiva relacionada con la violencia machista.
En estas entidades, entre las que destacan Colima, Querétaro, Campeche y Zacatecas, el registro de delitos como feminicidio, contra la libertad sexual, violencia familiar y de género se disparó entre 1% y hasta más de 1,200% por ciento, según un ejercicio realizado por Excélsior con base en cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
En este análisis se contrastó el número de carpetas de investigación iniciadas en el primer año de ejercicio de los actuales gobernadores con la cifra de 2020.
De estas 15 entidades, donde más aumentó la violencia contra las mujeres fue Colima, ya que pasó de 361 delitos en 2016, a cuatro mil 904 en 2020, 1,258% más, mientras que las indagatorias por violencia familiar pasaron de 203 a cuatro mil 338 en ese lapso.
En Querétaro, el aumento fue de 234%, ya que en 2015, cuando inició la actual administración estatal, se registraron mil 601 carpetas y el año pasado el número subió a cinco mil 349. En tanto, las investigaciones por violencia familiar se incrementaron de 942 a tres mil 552.
En contraste, Baja California y Chihuahua se mantuvieron prácticamente en el mismo nivel, con un aumento de sólo uno por ciento.
Según los datos del Secretariado Ejecutivo, sólo Tlaxcala redujo la incidencia delictiva relacionada con la violencia de género. Sin embargo, la disminución fue apenas de 13 por ciento.
La escalada se ha acelerado hasta mil 258% en los últimos años en entidades.
De los 15 estados que renovarán gubernatura en las elecciones del 6 de junio, en ninguno la autoridad saliente ha logrado reducir o revertir de manera significativa la violencia contra las mexicanas.
La incidencia en feminicidio, delitos contra la libertad sexual, violencia familiar y violencia de género se disparó entre 1% y hasta más de mil 200 por ciento en algunas entidades federativas durante los periodos de sus actuales mandatarios.
Excélsior observó, con base en cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), que sólo Tlaxcala redujo la incidencia delictiva relacionada con la violencia machista, pero la caída fue apenas de 13 por ciento.
En 2017, dicha entidad totalizó 108 carpetas de investigación por feminicidio, acoso, abuso, hostigamiento, violación, incesto, violencia contra la familia y de género, entre otros. Para 2020 esa cifra cayó a 94 delitos.
Para este ejercicio se comparó la incidencia delictiva por estados, de años completos, tomando como punto de partida el número de indagatorias iniciadas en el primer año de ejercicio del actual gobernador y contrastándolo con los datos actualizados por el SESNSP en enero pasado, correspondientes a todo 2020.
Entre los estados que este año elegirán nuevo gobernador, en Colima fue donde la violencia contra las mujeres aumentó de manera exponencial en los últimos años, sin dar señales de mitigación.
De 361 delitos registrados en 2016, para 2020 pasaron a cuatro mil 904, un incremento de mil 258 por ciento. Las indagatorias por violencia familiar se dispararon de 203 a cuatro mil 338 entre un año y otro.
En Querétaro, el alza fue de 234%, pues de mil 601 carpetas en 2015 el dato subió a cinco mil 349 el año pasado. Aquí también la violencia familiar se disparó, de 942 a tres mil 552 investigaciones.
En Sonora, Campeche, Zacatecas y San Luis Potosí, el aumento en las denuncias por violencia de género o violencia familiar entre 2015 y 2020 fue similar, de 177%, 173%, 170% y 164%, respectivamente. Debe mencionarse que Campeche es el único de los estados analizados donde hay un gobernador sustituto, pues Alejandro Moreno, quien asumió el 16 de septiembre de 2015, dejó el cargo el 13 de junio de 2019 para convertirse en líder nacional del PRI. En su lugar quedó Carlos Miguel Aysa.
Mientras en 2017 Nayarit registró 577 delitos, para 2020 fueron mil 168, lo que representa 102% más. En ese estado los feminicidios pasaron de cinco a 12 en el periodo señalado.
En Sinaloa el aumento fue de 89%: de tres mil 114 carpetas iniciadas en 2017, el año pasado fueron cinco mil 874. Destaca la reducción en feminicidios, de 82 a 26, situación que no mitigó la violencia machista en la entidad.
De dos mil 5 delitos en 2015, Baja California Sur subió a tres mil 223 en 2020, lo que representa un aumento de 61 por ciento. Los delitos contra la libertad sexual, como acoso o violación, escalaron de 314 a 723 en dicho periodo.
Michoacán y Guerrero tienen alzas en la violencia contra la mujer equiparables, de 52% y 51% respectivamente de 2015 a 2020. En el primero, los feminicidios pasaron de 12 a 21 y en el segundo, de uno a 12. También en Guerrero, el delito específico de violencia de género aumentó de 15 a 321 indagatorias.
Si bien en Nuevo León el alza en las problemáticas que afectan a las mujeres fue de sólo 13%, el feminicidio prendió un foco rojo al dispararse de uno a 67 casos entre 2015 y el año pasado.
Baja California y Chihuahua son estados en los que la violencia machista se mantuvo prácticamente en el mismo nivel durante los mandatos de sus actuales mandatarios, al registrar ambas entidades un incremento de sólo 1 por ciento.
Baja California, que estrenó gobernador apenas en 2019, pasó de 13 mil 249 delitos ese año a 13 mil 378 al siguiente, con siete casos más de feminicidio: 22 contra 31. En Chihuahua, de 14 mil 131 carpetas iniciadas en 2015, para 2020 subieron a 14 mil 227. Al igual que otros estados, el asesinato de mujeres por razones de género detonó alertas, pues de cero casos en el año de inicio del actual gobernador, para 2020 se dispararon 30. Lo mismo con la violencia de género: de cero indagatorias, se pasó a 32 el año pasado.