Opiniones y Comentarios
Julio Ricardo Blanchet Cruz
Mi padrino de bautizo -porque han de saber mis tres amables lectores, que a mí me bautizaron para que se me saliera el chamuco; por eso puedo afirmar que esa cosa no funciona. O en su defecto, que el agua de la pila bautismal era chafa. Vayan Ustedes a saber…
El caso es que mi Padrino, el General de DivisiónJulio García Villanueva, egresado del H. Colegio Militar, fue Jefe del Departamento de Artillería de la entonces Secretaría de Guerra y Marina, y Comandante de Región. Pues bien…
Todo esto lo comento por el video que circula donde el señor Presidente Andrés Manuel López Obrador, entra al Palacio Nacional como en su casa. En mangas de camisa, cruza solo la puerta, es decir, sin nadie que lo acompañe…
Lo que es insólito; y prueba que la toma del video es más preparada que un jugo de vegano en recuperación y en ayunas; pues es desde adentro, o sea, con el zócalo de fondo El caso es que camina solito…
Se abren de par en par las enormes puertas como si fuera a entrar un tráiler y aparece don Manuelito, como le dicen cariñosamente muchas de sus seguidoras…
Para esto, ya está formada una escolta. Firmes y con bandera en alto, en cuando aparece el Presidente, al toque de clarín, presentan armas con banda de guerra. Tambores cornetas y toda la cosa -gracias a Dios no les ha entrado por la modernidad y quieran hacerla con trombones, tubas y esas cosas más propias de los medios tiempos del futbol, pero así son los gringos- mientras don Manuelito continua adelante hasta detenerse a medio camino…
Gira sobre su flanco derecho, quedando de frente a la Bandera. La saluda militarmente sin estar tocado -haciendo referencia a que no tiene cubierta la cabeza, no a su cuestión de salud mental, de eso ya no hay la más mínima duda-…
La bandera se inclina hacia adelante -claro, si se inclinara para atrás no regresaría el saludo- y él prosigue su marcha mientras la banda de guerra termina sus marciales acordes…
Fuera ya del arco, como quien entra al patio central, gira 180 grados, da unos pasos como si esperara a algo o no viera bien, pues los soldados están bajo sombra, a él le da el Sol, entonces grita como si no hubiera nadie; y cortésmente vocifera: ¡Buenas tardes!…
Los militares a coro le responden cortésmente el saludo ¡Buenas tardes señor Presidente! con una armonía de voces, cabe decirlo, que corrobora que todo fue tan arreglado, como lo de la francesa Florence Cases de García Luna Productions…
No sé si alguien se cree esos teatros. Yo pienso que están tirando el dinero y que nadie puede creer que así son las cosas. Pero luego reflexiono y veo las inmensas filas de personas que con cubrebocas van a vacunarse y me digo a mi mismo. Sí. Sí le creen todo lo que dice. Y hasta pienso que va a ganar las elecciones…
Pero estábamos con mi siempre recordado Padrino. Es, o cuando menos era norma, que al entrar un General al cuartel, el clarín de orden tocaba atención el número de veces que correspondía al grado. Si es de Brigada una; dos si es Brigadier y tres si es Divisionario. Lo de las 4 estrellas es una moda gringa…
Y las cinco estrellas al Presidente, como lo hacía el “Tomandante Borolas” -las mejores caricaturas son vestido como militar con el uniforme arrastrando- es para acomplejados y como pa decir que él es quien manda. Cuando todos sabemos que los que mandan son los militares, aquí en China y en Rusia; y en Bolivia…
El caso es que mi Padrino, un hombre muy centrado -era vegetariano- tenía su uniforme en la oficina; y para entrar y salir del cuartel lo hacía vestido de civil. Precisamente para no llegar a caer en esos excesos cuando las sirenas cantan al oído.
Cambiando de tema…
Dice Don Sata, que con el video que circula en las redes donde el candidato a la gubernatura de Zacatecas, Daniel Monreal -no hace falta decir de quién es consanguíneo- donde literalmente le agarra las nalgas a una dama. Acaba de asegurar su triunfo…
Así que ni vayan a perder el tiempo yendo a votar hermanos zacatecanos. Aquí nomás son unos los chicharrones que truenan…
Y para acabarla de rematar, todo junto y de un sopetón, Arturo Zaldívar, se queda dos años más como Presidente de la SCJN, toda vez que los diputados aceptaron la propuesta de los senadores, que a su vez manipulados por el hermano del mano larga -digo, pa que ubiquemos bien a la familia- acataron las órdenes del Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas. Y a todo esto…
Para terminar como empezamos ayer…
El Ministro calló.
Ningún acento profanó el sentimiento
nacido del dolor y la amargura.
Y parecía que sobre aquel ambiente,
flotaba intensamente
un cuento de traición
y desventura.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.