Agencias/ Sociedad 3.0
Diversos medios de Estados Unidos, informaron que un pequeño de 6 años encontró una supuesta bala en su bolsa de Cheetos Flamin Hot.
El padre del niño, Bow Horn Weasel fue quién compró las frituras en una tienda, y fue hasta que el pequeño se terminó el contenido de la bolsa cuando hallaron un objeto similar a una bala.
El papá decidió enviar un mensaje a la empresa fabricante Frito-Lay, quién de inmediato respondió y afirmó que harían todo lo posible por remediar la situación.
«Frito-Lay está comprometido a garantizar la calidad y seguridad de nuestros productos. Esta situación es muy inusual y preocupante, y ya hemos tomado medidas para investigar e intentar para identificar la causa raíz. Agradecemos que el Sr. Weasel nos haya informado de esto y continuaremos trabajando con él para resolver este asunto», expresó un portavoz de la compañía.
Cabe mencionar que, Estados Unidos es un país con cientos de demandas al día, lo que sorprendió fue que el señor lo hizo no por obtener remuneración económica, si no para que la empresa se haga responsable y preste más atención de lo que empacan.
Con información de: Fernanda Familiar