Los Políticos
Por Salvador Muñoz
Se supone que los partidos buscan al mejor para sus candidatos para los cargos de representación popular en disputa… se supone.
En Medellín, el equipo de Marcos Isleño presume que ya está cantado como candidato por la alcaldía tras ser vencedor en la famosa “encuesta gansito” (que no patito ni tucán) que al igual que Morena, parece que el PVEM repite para la designación de sus cartas. Es decir, es el más conocido y tiene más positivos que negativos que su contrincante, Luis Mellado… así es como lo presumen: “Más positivos que negativos”.
Por supuesto, la metodología como los resultados de esa famosa “encuesta” tal parece que son materia de reserva como la cantidad de asuntos y casos que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha llevado a esa instancia aun cuando prometió y presume transparencia.
Tratando de darle el beneficio de la duda a las “encuestas gansito” del PVEM, ya nada más se preguntaría uno algunas cosas:
1.- ¿Cómo chinitas “el cuestionado” en las “encuestas gansito” ya no se acordó de los señalamientos de corrupción que se le hizo a la administración municipal de Isleño?
2.- Arrastrando sendas derrotas posteriores a su paso por la presidencia municipal, ¿el PVEM apuesta a la teoría de “La tercera es la vencida”?
3.- ¿Quizás le faltó a Luis Mellado llevar en su currículum fama de macho para tener los atributos que tal parece el PVEM pondera?
4.- ¿Hablamos entonces que en el Verde se hacen de la vista gorda con el Maltrato a la Mujer porque su bandera es contra el Maltrato a los Animales?
5.- ¡O es eso! ¿se defiende por encima de cualquier cosa a los animales… políticos, con eso de que Marcos Isleño acusó en cierto momento, campaña negra en su contra?
Como sea, entre los “isleños” su gallo, o tucán en este caso, aunque le digan El Gato, ya es Marcos…
Hasta acá, el primer paso… el siguiente paso para el PVEM es urgente: Operación Cicatriz.
En lo que parece ser la apuesta “Más vale malo conocido” con Marcos Isleño, el PVEM debe tomar en cuenta entonces el capital político que Luis Mellado ha adquirido sin mácula en su historial, es un imán interesante que cualquier otro partido o candidato quisiera…
El asunto es entender el porqué se llama “Operación Cicatriz”.
Para que haya cicatriz, debe haber una lesión, un traumatismo… en torno a este elemento, hay dolor… y en política, es inherente herir susceptibilidades.
Si el PVEM tiene la misma sensibilidad para elegir a sus candidatos que para tratar este tema con Luis Mellado, ya se puede decir mucho… y luego entonces, quizás ya sea demasiado tarde.
El pasado 16 de abril, Luis Mellado subió esto en su facebook:
“Como equipo nos reunimos buscando más y mejores formas para estar cerca de ti.
También aprovechamos para saludar y escuchar a Gabriel Cárdenas (NOTA: el a todas luces candidato del PAN por la alcaldía de Medellín).
No tenemos duda de que juntos (OJO) podremos hacer más y mejores cosas para nuestro municipio.
#ConectandoMedellín”.
Las decisiones, es claro, tienen consecuencias… acá están las inmediatas… en dos meses, veremos las otras.