Agencias/Sociedad 3.0
Miguel Ángel Luna, padre del niño Leonardo, quien murió en un parque acuático de Xcaret el 27 de marzo, afirmó que se tuvo que hincar y rogar en el Ministerio Público de Quintana Roo para que le entregaran el cuerpo de su hijo.
La súplica la hizo tras seis horas de encontrar trabas por parte de los ministeriales, quienes, además del perdón, le pedían no realizar la relatoría sobre cómo un filtro del parque Xenses succionó a su hijo.
En entrevista con Grupo REFORMA, narró que la familia consideró innecesaria una necropsia al cuerpo de Leo el 28 de marzo, la Vicefiscalía aceptó, pero a cambio de firmar un perdón a la empresa, lo cual aceptó de forma inmediata.
Sin embargo, al acudir a las instalaciones ministeriales en Playa del Carmen, dijo que quería ejercer su derecho de relatar oficialmente cómo ocurrió el incidente, lo que provocó molestia a los trabajadores públicos.
«Mi esposa no quería que tocaran el cuerpo de mi hijito, para qué hacerle eso, ya sabíamos las causas de muerte. Me dijeron que me daban la dispensa de necropsia, pero tenía que firmar el perdón para el parque, les dije que haría lo que quisieran, fui hacia la Vicefiscalía, pero que quería hacer relatoría de los hechos, lo que pasó, y me dijeron: ‘no, la indicación es que usted viene a ofrecer el perdón, nada más’, y les dije que tenía el derecho a la relatoría», dijo.
«Me advirtieron, que si no iba a tener de 10 a 15 días de espera, porque había muchos muertos, estuve seis horas en la Vicefiscalía, tuve que hincarme y llorar para que me permitieran llevármelo, creo que le toqué el corazón a la abogada y me dijo ‘ándele, pues, deje relatoría de hechos y tiene que firmar el perdón’. Creo que no querían que, me imagino, quedara evidencia de lo que había pasado».
Miguel Ángel Luna, médico reconocido en Durango, informó que ya cuenta con la asesoría de dos despachos de abogados para actuar contra quien resulte responsable por las negligencias que derivaron en la muerte de su hijo.
Grupo REFORMA informó ayer que el niño de 13 años murió el pasado sábado tras ser succionado por un filtro acuático en la atracción ‘Riolajante’, en el parque Xenses, de Grupo Xcaret.
Hasta apenas ayer la empresa emitió un primer comunicado donde reconoció la muerte, y este jueves, otro texto más donde lo atribuyó a un ‘error humano’.
En el caso de la Fiscalía General del Estado (FGE), sólo reveló que desde el 28 de marzo investiga el incidente como un homicidio culposo.
-Con información de El Diario MX