La candidata de derecha Keiko Fujimori solicitó ayer una auditoría al escrutinio de las elecciones peruanas que da como virtual ganador a su rival, el izquierdista Pedro Castillo, al tiempo que se presentó ante la Justicia una demanda de amparo para que se acepte revisar sus pedidos para anular sufragios que llegaron fuera de plazo.
A través de su partido Fuerza Popular, Fujimori pidió “una auditoría informática del proceso de digitalización de actas electorales”, cuyo recuento pone a Castillo con una ventaja estrecha pero casi irreversible de 48 mil votos.
La razón esgrimida para reclamar esta auditoría es que “se ha detectado por redes sociales una serie de cuestionamientos” entre el acta y el sistema informático de la Oficina Nacional de Procesos Electorales.
“Solo pedimos elecciones limpias y que se revisen todas las irregularidades. No nos vamos a rendir”, escribió en redes sociales Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori.
La auditoría fue solicitada después de que la mayoría de los más de 800 recursos para anular 200 mil votos por presuntas irregularidades hayan sido rechazados por los jurados electorales por llegar fuera de plazo y por no presentar pruebas consistentes de que hubo un fraude en las mesas de votación.