Uno de los columnistas más informados en el estado de Veracruz es Arturo Reyes Isidoro. En unas de las secciones de su “Prosa Aprisa”, Reyes Isidoro comenta que la Auditoría Superior de la Federación anda tras las carnes del “Lord Molécula” veracruzano, el doctor “patito” Zenyazen Escobar: “No hay mucha información, porque, como la puerta negra de la canción, está cerrada con tres candados, pero ha venido trascendiendo que el secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, ya está en la mira de la Auditoría Superior de la Federación por el presunto mal manejo de recursos federales del ramo educativo. También trasciende que tiene una considerable cantidad de solicitudes de información sobre el manejo de su dependencia, pero que se niega a responderlas. Cada vez son más fuertes las versiones de que además de titular del ramo educativo en Veracruz, también estaría convirtiéndose en un importante agente inmobiliario. Al parecer, en el Estado lo estaría protegiendo la Contraloría General”. Habrá que esperar para ver qué pasa, con eso de que en este gobierno la corrupción, extorsión y saqueo por parte de los funcionarios públicos ha dejado de ser un delito.
López Obrador dice: “No se puede ningunear al presidente de México”. Pero él, que tal ningunea a la clase media, a la prensa y sus opositores
Desde que pasaron las elecciones del 6 de junio, el presidente López Obrador ha dicho hasta el cansancio que la clase media de México es manipulable, aspiracionista. Dijo en una conferencia mañanera: “Hay un sector de la clase media que siempre ha sido así, muy individualista, que le da la espalda al prójimo, aspiracionista, que lo que quiere es ser como los de arriba y encaramarse lo más que se pueda sin escrúpulos morales sin ninguna índole. Son partidarios del que no transa, no avanza”. Los insultos del presidente a este sector de la población se deben a que buena parte de la clase media le ha dado la espalda a su forma de gobernar; para el presidente la clase media es el nuevo enemigo de la Cuarta Transformación. Sin embargo, no se atreva usted a llamar “mesías tropical” o “falso mesías” al presidente de México. Entonces el presidente respinga: “Se olvidan de que el presidente de México es el representante de todo el pueblo y que cuando se tiene legalidad y cuando se tiene legitimidad, por eso es importante la democracia, no se puede ningunear al presidente de México, porque es el representante de todos los mexicanos”. En otras ocasiones López Obrador ha insultado a aquellos que no comulgan con su doctrina. A los periodistas los llama chayoteros, aquellos que comen “maíz con gorgojo”; a las clases altas los califica de fifís. La lista de insultos que han salido de la boca del presidente es enorme: Prensa fifí, conservadores, chayoteros, pasquín inmundo, maiceados, hampa del periodismo, machuchón, zopilotes, canallín, chachalaca, pandilla de rufianes, desvergonzado…
Después de la regañiza a los superdelegados por parte de AMLO, renuncia el coordinador de ellos, Gabriel García Hernández
El periodista Leonardo Kourchenko publicó en su columna de El Financiero, que el presidente de México, quien dice estar “feliz, feliz, feliz” con los resultados de las elecciones del 6 de junio, tuvo una reunión con los superdelegados de los estados, quienes en realidad operan los programas sociales de Bienestar. Señala Leonardo Kourchenko: “El mensaje fue claro, sin ambigüedades y con un tono más que enérgico: AMLO los acusó de soberbios, envanecidos, ambiciosos, vulgares, individualistas, buscando sólo su propio beneficio personal, peleando cotos de poder como si hubieran muchos proyectos: ‘Que les quede claro -espetó el presidente- proyecto sólo hay uno’. ¡Vaya regaño!”. Después de esa regañiza Gabriel García Hernández, coordinador General para Programas del Desarrollo de la Presidencia de la República, renunció al cargo alegando que regresará a su escaño en el Senado: “Es personal la decisión y va haber una explicación. El senador suplente que está ahora, Alejandro Peña, se va a participar en Morena, entonces como es el suplente no podemos dejar un espacio en el Senado de la República y regresamos”. La verdad es que el presidente López Obrador no estuvo de acuerdo con los resultados. El presidente espera que sus superdelegados le dejen claro a los beneficiarios de los programas de Bienestar, que si él los está manteniendo, justo es que voten por su partido.
Armando Ortiz Twitter: @aortiz52 @lbajopalabra