Después de la elección “más grande de la historia” ya nada podrá ser igual”, pues difícilmente se repetirá la ignominiosa escena de una obsecuente Cámara de diputados votando iniciativas sabidamente inconstitucionales “sin cambiarle ni una coma”, evitar su repetición es ganancia tras el decoro perdido. Ahora el gobierno tendrá necesidad de negociar la mayoría calificada con los partidos de la alianza, si no se rompe la sinergia de mantenerse como bloque opositor. De lo contrario los esfuerzos de la alianza caerán en el vacío infructuoso. Mayor equilibrio entre poderes significa saludable contrapeso a la autoridad. En las entidades federativas Morena enriquece su inventario al incorporar a su repertorio 11 gubernaturas más, o sea, mayor número de habitantes gobernado (58 millones, aproximadamente), arrebatados al PRI, que por su parte debe darse a la urgente tarea de reconstituirse para alejar el riesgo de escribir el triste colofón de su existencia plena de éxitos políticos y electorales.