El periodista Jorge Camero fue baleado ayer jueves en una localidad del norte de México, y es el sexto comunicador asesinado en el país en dos meses, que han sido considerados los más violentos para la prensa mexicana.
Camero, quien dirigía el portal de noticias «El Informativo”, recibió varios disparos con un arma de fuego el jueves (24.02.2022) cuando se encontraba dentro de un gimnasio en la colonia Libertad del municipio Empalme, en el estado norteño de Sonora, anunció la Fiscalía General estatal. En el lugar se recolectaron ocho casquillos de bala calibre 9 milímetros.
El periodista se había desempeñado hasta hace unos días como secretario particular del alcalde del municipio de Empalme, cargo que dejó para retomar su actividad en el portal de noticias, señalaron medios locales.
La Fiscalía indicó en su cuenta de Twitter que Camero había solicitado una licencia al ayuntamiento el 9 de febrero luego que se difundiese en las redes sociales un video en el que se le señalaba por participar en una estructura criminal, situación que estaba siendo investigada por las autoridades.
En los primeros dos meses del año, otros cinco comunicadores han sido asesinados, una situación que ha desatado protestas en varias ciudades de México y reacciones de rechazo de diferentes organizaciones de defensa de los derechos de los periodistas.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, expresó esta semana preocupación por los asesinatos de reporteros, lo que llevó al presidente, Andrés Manuel López Obrador, a afirmar que el alto funcionario estaba desinformado.
López Obrador pareció tomar el comentario como una crítica a los esfuerzos de México para investigar esos crímenes y proteger a los periodistas, un grupo con el que se ha estado peleando en las últimas semanas.
Tras las declaraciones del mandatario, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, difundió una carta que le envió a su homólogo estadounidense en la que le hizo notar que los casos de los periodistas asesinados se encuentran bajo indagación por parte de las autoridades locales y federales, y que se trabaja para garantizar que no haya impunidad.
Al referirse a los avances en estos casos, Ebrard dijo que se ha detenido y procesado a seis personas presuntamente involucradas en tres de los cinco homicidios.
José Luis Gamboa, director de un portal de internet, murió a comienzos de enero a consecuencia de una herida con arma blanca en el estado de Veracruz, con litoral en el Golfo de México. Pocos días después fueron baleados el fotógrafo independiente Margarito Martínez y la periodista Lourdes Maldonado en la ciudad fronteriza de Tijuana, el 17 y 23 enero, respectivamente. A finales de ese mes, Roberto Toledo, colaborador del portal de noticias Monitor Michoacán, falleció tras recibir varios disparos en la ciudad de Zitácuaro, en el estado occidental de Michoacán.
El 10 de febrero fue asesinado Heber López, director del portal Noticias Web, en la localidad portuaria de Salina Cruz, en el estado sureño de Oaxaca.
México es el país más violento del hemisferio occidental para el ejercicio del periodismo, según el Comité para la Protección de los Periodistas, un organismo activista de protección a la prensa con sede en Nueva York. De acuerdo con sus datos, nueve periodistas fueron asesinados en todo 2021 en el país.
La dificultad para esclarecer los homicidios de reporteros y activistas es un grave problema en México, según reconoció el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, quien en diciembre admitió que la impunidad en esos casos supera el 90%.