viernes, noviembre 15, 2024

No es el único…

Realmente el señor Presidente López Obrador pensará que le vamos a creer que no sabía en donde “trabajaba” su bodoque.  ¡Por favor! pensará que somos tontos.  Porque lo único que logra con esas declaraciones es que cada vez quede más en entredicho su salud mental y se hunda más en el pantano de sus mentiras.  Y mientras más se mueve, más se entrampa…

Pero es lo mismo que le pasa a Joe Biden, el Presidente de los EE.UU. quien después de hacer el ridículo con la inminente “invasión” rusa a Ucrania; todavía insiste en que ésta puede llevarse a cabo de un momento a otro…

Pero parece epidemia; pues Jens Stoltenberg, el Secretario General de la OTAN, declaró en Bélgica que seguirá denunciando los “planes agresivos de Rusia”; a pesar de que dice que la Alianza está dispuesta a debatir con Rusia para encontrar una solución diplomática…

Pero declaró que están preparados para lo peor. Sin embargo, si Rusia invade Ucrania, que no es miembro de la OTAN, “pagará un alto precio”.  Cuando el alto precio que se está pagando no nada más es en Ucrania, sino en toda Europa, es por el gas que les está llegando desde EE.UU. Pero carísimo…

Por lo que ya hay varias naciones de la UE que están de acuerdo en que comience a funcionar y surtirse de gas por el Stream II.  Por lo que presionan a Alemania para que ya autorice su funcionamiento…

Pero no todo el escándalo de la invasión rusa fue en vano, Washington logró colocar 80 toneladas de armamento y municiones a Kiev; y el Reino Unido de la Gran Bretaña, le prestó poco más de 2,200 millones de dólares; que lo utilizará para comprarles armamento a ellos mismos…

Y como no lo podrán usar para defenderse de los rusos -pues como que no parece que tengan la más mínima intención de invadirlos- lo podrán utilizar en la guerra que sostienen en Donbás, contra las repúblicas separatistas de Lugansk y Donetsk…

Por cierto, que los mal pensados de siempre -pues con eso de “piensa mal y acertarás”, no les falla- dicen que Biden está muy enojado con Putin, porque nomás no quiere invadir a Ucrania y lo está haciendo quedar mal ante la comunidad internacional…

Fue sabido y aquí lo comentamos, que durante la conferencia virtual que tuvo con los integrantes de la OTAN; cuando Biden les advirtió que Rusia iba a invadir Ucrania el día 16; como que no muy le creyeron.  Y luego, encima de todo, los filosos caricaturistas ya se pitorrean de él, comparando al Presidente Biden con Pinocho…

Voy a creer -regresando con el tema- ¿que no sabía en qué trabajaba su hijo? Ni cómo vivía; cuando hay fotos en la alberca grandota con el hermanito menor; que seguramente no llegó a Houston de aventón…

No obstante, la albercota es la punta del iceberg, lo demás ha ido saliendo mientras los personajes se enredan cada vez más con sus declaraciones; urdiendo una trama tan llena de mentiras y errores, que les ha servido a la oposición de combustible para quemar la imagen de honradez…

Cada vez, o sea, un día sí y otro también, que el Presidente repita que no se confundan, que no son iguales, esa vocecita que todos escuchamos y que nos señala duramente, pues no la podemos engañar.  Pues cada vez que salga con su hipócrita cantaleta de la honradez y de que no son iguales, escuchará al oído.  No seas hipócrita; no seas cínico.  Ya nadie te creé…

Y espérense a lo que falta, amables lectores.  Porque ya en el desquiciamiento vengativo -el señor Presidente dice que no es vengativo, ¡qué si lo fuera!- está recurriendo a la fuerza del Estado para hostigar a un ciudadano…

Y le pidió a un Instituto independiente, como el INAI que viole la norma, es decir, que pase por encima de las Leyes y le dé una información que requiere…

Y como le contestan que eso no puede ser.  En uno de esos arranques propios de los enfermos, en él cada vez más frecuentes -ojo- la arremete en contra del Instituto y les dice de todo. Ya saben: conservadores, al servicio de la mafia, neoliberales, golpistas, conspiradores y toda esa retahíla de linduras que acostumbra decir cada mañana a quienes no están de acuerdo con él.

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.

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