DE PRIMERA MANO TAJÍN
Por Omar Zúñiga
*MC, su asamblea y las ausencias
La operación político-electoral al interior de los gobiernos de los tres niveles de gobierno se ha dado desde que el mundo es mundo y que existe la política.
La cuestión empieza a descomponerse cuando los encargados de dicha operación incurren en excesos y sienten que, porque les han encomendado esta ciertamente delicada tarea, son depositarios de una especie de superpower, que los transforma en dueños de vidas y conciencias.
Este es el caso de un persona que –debo confesarlo- cuando me dijeron su apelativo, inmediatamente me empecé a carcajear, hasta que mi interlocutore se me quedó viendo con cara de –“¿de qué te ríes pendejo”-; en ese momento sentí el famoso quitarrisas y me explicó de manera muy comedida, pero ya enojade que así se llamaba, entonces esto lo platico porque de ninguna manera puedo burlarme, pues de hacerlo podría incurrir en una transgresión y por eso no lo haré.
Me refiero, pues, al señor Aceituno (sí, así se apellida) Luis Alberto Aceituno Vázquez, de profesión ingeniero que cobra sus quincenas como Coordinador de Planeación y Estrategia del Consejo Técnico de Seguridad Pública.
Este personaje ha recibido señalamientos directos de personal a su cargo de misoginia, maltrato a mujeres, que se quejan no con él, obvio, ni con el Órgano Interno de Control por el temor fundado a represalias que pueden terminar con el trabajo del quejose, pues la misoginia exacerbada no lo limita a “mancharse” sólo con las mujeres sino que también con los varones, agarra parejo, pues; es por eso que las quejas van dirigidas a otras fuentes.
La más reciente gracia de Don Aceituno de que tenemos noticia fue el pasado jueves 24 de febrero, Día de la Bandera, donde de manera “muy comedida” convocó a los empleados del CESP para avisarles que durante todo este mes (marzo) se organizaran en cuadrillas para ir a pintar bardas con el hashtag #AMLOseQueda en referencia a la jornada de referéndum de la famosa revocación de mandato (que dicho sea de paso, reitero que esta vacilada no tiene razón de ser, pues lo único que se logró es un gasto multimillonario que se hubiera destinado a otra cosa, la paz mundial por ejemplo, jeje –sí, es sarcasmo- y que el presidente se quede para el periodo para el que cual fue electo y ya –esto no es sarcasmo-).
Pues bueno, además de hacerla de pintores urbanos, los trabajadores deberán llevar sus utensilios, sí: pintura y brocha gorda y si no le sabe mucho, pues hasta trapito pa’las manos. Si quieres trabajar, pues le inviertes.
La cosa no termina ahí, además les conminaron muy atentamente a organizarse en cuadrillas de ocho compañeros para salir a las calles, casa por casa y promover el voto en esta jornada de revocación.
Este tema tiene una sola lectura: el gobierno sabe perfectamente que si no da el ancho aunque gane, pierde; es decir, para que sea vinculatorio el referéndum, debe votar como mínimo el 40 por ciento del Padrón Electoral, que suma según el INE, 93 millones 487 mil 582 ciudadanos a febrero de este año, y por otra parte, en el hipotético caso de que se llegase a juntar ese 40 por ciento, debe haber al menos 30.11 millones de votos, que fueron con los que Andrés Manuel López Obrador ganó la Presidencia, de otra manera, todo será un gran show de 3 mil millones de pesos y un rotundo fracaso.
Por eso, don Aceituno y sus jefes están desesperados…, tic, tac, el reloj sigue su curso.
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El viernes pasado, Movimiento Ciudadano realizó su Asamblea Estatal Ordinaria (aunque ellos le llamen de otra manera muy rara) en al que eligieron a su candidatos a las elecciones extraordinarias para presidente municipal en Jesús Carranza, Amatitlán, Chiconamel y Tlacotepec de Mejía, en que resultaron electos Selena Hernández Rueda, Luis Donaldo Camacho Merino, Edith Jocelyn Austria Acosta y Sonia Solís Espejo, respectivamente.
El tema es que estuvo la plana mayor de MC, salvo las ausencias, muy notorias de las diputadas Maribel Ramírez Topete y Ruth Callejas y el alcalde de Tlacotalpan Luis Güicho Medina. ¿qué habrá sido más importante? ¡Investíguelo Vargas!
¡Qué barbaridad!
deprimera.mano2020@gmail.com