Serpientes y Escaleras
Salvador García Soto
A un mes de que Morena defina quién será su candidata o candidato a gobernador del Estado de México, con base en una encuesta cuyos resultados se harán públicos el próximo 20 de julio, la sucesión en la entidad mexiquense se adelanta más de un año.
Y en la batalla electoral que se anticipa cerrada y competida entre el partido del presidente López Obrador y la Alianza Va Por México del PRI-PAN-PRD, se ve venir un choque de estructuras entre la maquinaria federal de los programas sociales del gobierno y la operación de la estructura priista del Grupo Atlacomulco, que defenderá con todo su bastión histórico.
En ese choque frontal ya no hay dudas de que, así como López Obrador ya dio la orden de que su partido vaya con todo, sin importar los tiempos o las posibles violaciones a la ley electoral al adelantar tiempos y definiciones de candidatos, también en Toluca el gobernador Alfredo del Mazo ha decidido enfrentar al aparato morenista y al propio Presidente, con quien mantendrá la relación institucional, pero peleará por mantener el gobierno mexiquense en manos del PRI, apoyado no sólo por la alianza con el PAN y PRD, sino por la plana mayor del priismo nacional, que acuerparán al mandatario mexiquense en un instinto de supervivencia del viejo partido.
Mientras, en Morena las negociaciones continúan para decidir quiénes serán los participantes en la encuesta para definir al candidato. Ayer hubo una reunión entre el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y los seis aspirantes de Morena al gobierno mexiquense. Al encuentro acudieron el senador Higinio Martínez, la secretaria Delfina Gómez, el director de Aduanas, Horacio Duarte; el director del ISSSTE, Pedro Zenteno, y los alcaldes de Tecamac, Mariela Gutiérrez, y de Ecatepec, Fernando Vilchis.
Ahí el secretario les anunció que una vez que se lance la convocatoria para la elección del candidato, en los primeros días de julio, habrá una “preselección” en la que se definirá a los aspirantes que sí podrán participar en la encuesta. Se habla de máximo 3 o 4 que serían medidos en el sondeo de Morena, cuyo ganador será dado a conocer el próximo 20 de julio, según anunció el dirigente nacional, Mario Delgado, el pasado 13 de junio en Toluca. Mientras se realiza esa preselección, Adán Augusto les pidió a los aspirantes mexiquenses que trabajen y dialoguen entre ellos para ver si pueden llegar a un “consenso” y definir quiénes participan en la encuesta y quién puede ser el mejor candidato o candidata.
Aunque la lógica indica que en una encuesta interna tendrían que estar el senador Higinio, la maestra Delfina, Horacio Duarte y un cuarto aspirante que puede surgir de entre Fernando Vilchis o Pedro Zenteno, la realidad es que entre los integrantes del llamado Grupo Texcoco, que llevan prioridad en este proceso, hay la idea de impulsar primero un “consenso” entre ellos para evitar cualquier tensión o distanciamiento. El senador Higinio Martínez, por ejemplo, no está convencido de participar en una encuesta contra sus dos amigos y discípulos Horacio Duarte y Delfina Gómez, por lo que los tres estarían buscando ponerse de acuerdo y llegar a un consenso entre ellos para definir quiénes deben representar a su grupo en la postulación.
La definición del candidato mexiquense en el partido gobernante, trata de evitar a toda costa una ruptura o un distanciamiento con figuras emblemáticas como el senador Higinio Martínez, quien insiste en la necesidad de un “consenso” para definir quién será el candidato o candidata.
Y mientras los morenistas tejen fino para tomar muy pronto su definición, en la Alianza Va Por México va quedando claro que el candidato o candidata en el Edomex lo va a definir el PRI. Así se lo exigieron los exdirigentes nacionales priistas que acudieron la semana pasada a reunirse con el líder del tricolor, Alejandro Moreno. “El PRI tiene que tener prioridad en la definición del Estado de México, porque le corresponde por su fuerza y arraigo en la entidad”, dijo César Camacho, exdirigente nacional priista, en el encuentro que tuvo lugar en Insurgentes Norte, donde también le pidieron a “Alito” respetar la decisión que tome el gobernador Alfredo del Mazo y no intentar forzar ni imponer candidatos en el Edomex, como sucedió en algunos estados en las elecciones del pasado 5 de junio.
Y es que Del Mazo ha empezado ya a perfilar sus opciones para dar la batalla contra Morena en el 2023. Desde hace algunas semanas el gobernador mexiquense les dio luz verde a varios miembros de su gabinete para que “empezaran a moverse” en pos de la candidatura del PRI. Entre ellos estaba el secretario de Gobierno, Ernesto Nemer, y la secretaria de Desarrollo Social, Alejandra del Moral. Pero luego, el propio Del Mazo sorprendió cuando anunció la salida de Nemer de su equipo, al relevarlo en la Secretaría de Gobierno por Luis Felipe Puente.
El despido de Nemer, dicen fuentes mexiquenses, se debió a que Ernesto se dedicó de lleno a hacer campaña y a promover su imagen, olvidándose y descuidando su función en el gobierno. “Se le subió y se mareó, ya se sentía candidato”, nos dijo un funcionario del gobierno delmacista. La salida del aspirante más experimentado favorece a la secretaria Del Moral, quien, con un perfil más bajo, joven pero ya con una trayectoria política propia que empezó en el gobierno de Peña Nieto, continuó con Eruviel Ávila y se consolidó con Del Mazo, pasando también por la Cámara de Diputados bajo el liderazgo de Manlio Fabio Beltrones, hoy empieza a verse como la posible favorita de la clase política mexiquense.
También está la diputada federal Ana Lilia Herrera, también con trayectoria y reconocimiento, pero con un pequeño problema: su pésima relación con el actual gobernador, algo que podría jugar en su contra. Y por el lado del PAN, el que sigue apuntadísimo es el exalcalde de Huixquilucan, Enrique Vargas, quien podría representar un problema si no acepta que la definición del candidato le corresponde al PRI, aunque ya se habla de una negociación política que podrían ofrecerle al pupilo de Santiago Creel.
Así que, con la sucesión mexiquense no solo adelantada, sino acelerada, muy pronto podrían desgranarse los nombres de candidatos y candidatas al gobierno de esa entidad, faltando incluso un año para los comicios. De la definición que tome Morena dependerán muchas otras decisiones, no sólo el candidato o candidata de la Alianza Va Por México, sino incluso las definiciones en Coahuila, donde el género de los candidatos o candidatas dependerá de lo que se decida en el Edomex. De ese tamaño es la prioridad que tiene la elección mexiquense… Los dados mandan Serpiente. Se acabó la buena racha.