Con tanta violencia, tantos desastres y tantas calamidades encima, se antoja de repente soñar un poco, para darnos un descanso de la realidad:
CdMx. Domingo 1º de diciembre de 2019.-En la celebración del primer año de su gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró el majestuoso Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, que coloca a nuestra nación en la vanguardia de la aviación mundial y abre una puerta para el comercio global, el turismo y la comunicación con todo el planeta.
El comité de construcción que nombró el nuevo gobierno, al mismo tiempo que aceleró la construcción, se dedicó en este año a recuperar recursos que se habían estado yendo por la vía de los moches y consiguió rehacer los contratos en condiciones mucho más ventajosas para el erario.
El monumental aeropuerto es considerado el mejor y más moderno de América Latina, razón por la cual las principales aerolíneas se apresuraron a solicitar sus servicios, y arranca con conexiones a todos los rincones del planeta.
En su mensaje inaugural, el mandatario ofreció un resumen de las acciones desarrolladas durante su gobierno e hizo énfasis en su cruzada contra la corrupción, en la que han sido puestos en la cárcel pillos como los ex priistas Manuel Bartlett y Alejandro Gertz Manero.
Recordó que la lucha contra los corruptos va contra quienes robaron al erario en el pasado, pero también está dirigida a los miembros de su proyecto de transformación nacional que no entiendan los nuevos tiempos y la exigencia de una honestidad prístina.
Por ello es que ahora enfrentan el peso de la justicia popular traidores que se dejaron llevar por su ambición o sus desviaciones, como Irma Eréndira Sandoval, su esposo John Ackerman y Félix Salgado Macedonio.
Del mismo modo, el mandatario hizo un regaño público a su hijo mayor, debido a que vivía en un ambiente de lujos y derroche en los Estados Unidos, y ordenó una investigación exhaustiva para garantizar que de ninguna área del Gobierno salgan recursos oscuros o claros para beneficiar a su vástago.
“El buen juez por su casa empieza,” dijo López Obrador, “y todos en mi familia deben recordar que la ley es la ley, y se debe acatar.”
La nueva transparencia en el manejo de los dineros públicos permitió, por ejemplo, hacer más eficiente la compra de las medicinas necesarias para el sector salud, de modo que ahora a ningún enfermo le faltan atención y remedios. Además, hemos conseguido hacer universal la oferta de servicios del Seguro Popular.
«Ahora tenemos un sistema de salud que se acerca a los más avanzados, y conseguida la cobertura total para la población, nos estamos dedicando a mejorar hasta en sus mínimos detalles la calidad y la calidez del servicio.»
(Continuará).