Agencias
Una jueza de Querétaro dictó diez años y seis meses de prisión al responsable de haber envenenado a los perros rescatistas el 13 de junio de 2021 tras haberle proporcionado salchichas envenenadas y causarle la muerte a los dos animales. Balam, hijo de Athos, sufrió también una grave afectación por la comida adulterada.
De acuerdo con la jueza, el ahora culpable actuó de manera dolosa y cruel al dar salchichas envenenadas a los perros rescatistas.
Para la sentencia se tomó en cuenta un video y las reiteradas veces que Benjamín aseguró que tenía intenciones de matar a los canes, pues le molestaba que fueran entrenados en la jardinera de la colonia.
La jueza también determinó que Benjamín deberá pagar 2.4 millones de pesos como reparación del daño.
Benjamín o Vicente Benjamín, escuchó su sentencia que emitió la juez en la sala 3 de los juzgados de oralidad penal del Tribunal Superior de Justicia de Querétaro, vistiendo una camisa a cuadros, un chaleco en color negro, inclinando hacia el frente en la silla, con codos recargados en el escritorio, escuchó su sentencia por hacer envenenando a dos caninos dedicados y especializados al rescate y salvaguarda de personas.
La juez lo citó nuevamente el próximo martes 30 agosto del presente a las 14:30 horas para entregarle por escrito su sentencia y la forma en que deberá cumplirse.
La indemnización por Athos es de 2,145,479 pesos, por Tango, es de 223,548 pesos y la reparación del daño moral por 50 mil pesos, además se le suspendieron sus derechos civiles y políticos y una amonestación en privado.
Los caninos fueron considerados por la juez como un miembros de una familia y una herramienta de trabajo, mismos que prestaban servicios de manera altruista y contaban con certificaciones internacionales.
En su momento, su pudo acreditar la culpabilidad, capacidad mental y física para decidir, teniendo la opción de actuar de otra forma y decidir ejecutar la acción, siendo el colocar en una jardinera, la salchicha con el químico tóxico, que provocó la muerte de Athos y Tango, y las lesiones en Balam, quien actualmente se encontraba bajo tratamiento médico.
La acción de Benjamín, privó a la comunidad local, estatal, nacional e internacional de que estos ejemplares siguieran proporcionando sus servicios en el rescate y salvaguarda de la integridad de las personas.
Así se emitió el primer fallo por delitos contra lo animales agravado y el primer juicio en el estado de Querétaro.