A la farsa del intento de asesinato a la vicepresidente de Argentina, Cristina Elisabeth Fernández, viuda de Kirchner; y prácticamente heredera de la presidencia a la muerte de Néstor (1950 – 2010)…
El caso es que, a la descendiente del peronismo, se sumó, no podía ser de otra manera, su lacayo, domestico, asistente, paje, ordenanza, o como quieran llamar, que es quien da la cara como Presidente, Alberto Ángel Fernández, seis años menor que ella; quien declaró que a él también intentan asesinarlo y ya lo han amenazado…
Lo que parece, es que se inventaron lo del intento de magnicidio -porque no planearon un magnicidio, sino un intento, que quede claro- para desviar la atención de la crisis económica que están viviendo los argentinos -como no recuerdan otra- el dinero no les alcanza para comprar comida…
Y doña Cristina tiene un juicio pendiente por disponer de millones de dólares y depositarlos fuera de Argentina. Pero la vicepresidente, vestida de negro, sale con un rosario colgando de su cuello, que le da arriba del ombligo y termina con un crucifijo. Como obispo ¡vaya! pa que se note…
La interrogante será saber si los jueces aplicarán la Ley, cuando al parecer hay documentos bancarios que avalan múltiples operaciones millonarias; o la presión gubernamental será tan fuerte que den una sentencia a modo…
Pero lo cierto es, que, en la indagatoria sobre el intento de magnicidio, pues ya hay detenidos, se relata una trama que ya habla hasta de terrorismo. Una historia que debe de hacer pensar hasta qué punto se puede inventar y sostener una mentira a todas luces increíble, pero que la dan como cierta…
Aquí en México tenemos varios ejemplos tan burdos como el tango que se acaban de reventar en la Casa Rosada con el frustrado atentado a la viuda. Del que ya se ha comentado su similitud con el que sufrió José Murat cuando era Gobernador en Oaxaca…
Pero en la escala de lo absurdo, de lo aberrante, no podemos dejar de señalar La Verdad Histórica; o la de Aburto el asesino solitario de Luis Donaldo Colosio; y la más cínica e increíble de todas, el de la pequeña Paulette, de cuyo encubrimiento es responsable Peña Nieto. Pero regresemos hasta Argentina…
Porque ya van tras Gabriel Carrizo, el peligroso cerebro, líder de la banda -ora ya es una banda- conocida como “Los copitos”, de la cual forman parte los dos detenidos, más la novia de alguno de ellos…
Que fueron quienes calcularon el magnicidio; tal vez inspirados en Florence Cassez e Israel Vallarta, o en Bonnie and Clyde; pero afortunadamente este fue frustrado…
El nombre de “Los copitos”, obedece a que, en sus tiempos libres, se dedican a vender copitos de algodón de azúcar. Más claro, ni el agua. Tartufo
No estoy muy seguro de que hoy haya algo que celebrar; pero, de cualquier forma, la cita es, como siempre, a las 15:00 hrs. por Magia 93.7 de FM, o por Internet; y desde tempranito por aquí, si el Sol me presta vida.