QUÉ difícil es entender lo que está sucediendo en el gobierno federal. El próximo domingo, nada menos que el jefe del ejecutivo federal, encabezará una marcha, caminata o desfile, en la ciudad de México, para demostrar la fuerza política que tiene. Ya hemos venido comentando los pormenores de este evento político, del cual, aún cuando todavía no se realiza, algunos de los integrantes del partido morena, ya se sienten orgullosos, tan solo, porque estarán junto a su jefe político, a su presidente, a su pastor, o como le quieran llamar al hombre que los ha seducido con su palabrería, en la que, al parecer, ya no cree toda la población.
Se habla de miles y miles de personas, que, obligadas por alguna razón, acudirán a esta convocatoria presidencial, con costo, desde luego, al erario nacional. Dicen los que saben y que han seguido de cerca los pormenores de esta concentración política, que el costo de este capricho presidencial, ronda, nada menos que los tres mil millones de pesos, considerando diversos gastos que se tienen que hacer, es decir, desde la contratación de autobuses para trasladar desde los diversos puntos del territorio nacional y hasta la ciudad de México, a varios miles de militantes de morena, seguidores de López Obrador, y a muy pocos simpatizantes de esta política de la llamada cuarta transformación.
La cuestión está en demostrarse así mismos, de que pueden hacer también su manifestación, aunque en esta ocasión será de apoyo al presidente, y no en contra, como fue la marcha del trece de noviembre, que fue voluntaria y que tuvo como objetivo primordial, defender una de las tantas instituciones ampliamente reconocidas por su labor, tanto a nivel nacional, como en el propio extranjero, donde se ha aceptado su amplio trabajo en favor de la democracia. Nos referimos, sin duda, al instituto nacional electoral, que, de acuerdo a la iniciativa presidencial de reforma electoral, se le quiere modificar su estructura para hacerla más vulnerable a los intereses del partido político en el poder.
Pero, como esa fue una gran manifestación voluntaria de la sociedad, el presidente se sintió rebasado en el campo popular, por lo que decidió, de inmediato, hacer la suya propia, donde serán puros morenistas, los que aplaudirán necedades.
Vaya, que esto ya se ha vuelto un verdadero show político, preocupante, por cierto, para el resto de la sociedad.
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SEGURIDAD, ASIGNATURA PENDIENTE EN VERACRUZ.
EL GOBERNADOR DEL ESTADO, Cuitláhuac García Jiménez, rindió, apenas el quince de este mes, su cuarto informe. En este documento se manifiestan los avances generales de la administración estatal, principalmente, en algunos temas que son de suma importancia para los veracruzanos. Entre ellos, sin duda, se encuentra el relacionado con la seguridad de todos los que habitan el territorio estatal, donde las cifras negativas de la comisión de delitos se minimizan y se da por cierta una tarea en contra de los altos índices de este fenómeno social.
La verdad de las cosas, es que poco se ha hecho en este asunto que ocupa y preocupa a toda la población veracruzana, principalmente, por los constantes homicidios, levantones, secuestros, asaltos a mano armada, delitos en contra de las mujeres, robos a casa habitación y uno de los que más se ha venido incrementando, es el ejecutado en las calles, no tan solo contra las personas, sino también en contra de sus propias pertenencias, como son los automóviles que son desvalijados en cuestión de segundos, debido a la alta profesionalización de la delincuencia común, contra la cual, ninguna policía ha logrado detenerlos.
La inseguridad, es un fenómeno social que ha crecido considerablemente y ha rebasado, sin duda, a la propia autoridad, es decir, al propio Estado, por lo que cualquier dato, aportado como resultado cierto en el combate a este problema, puede ser, finalmente, una falsa noticia.
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EN VERACRUZ, EL MEJOR ALCALDE, ES AHUED.
EN LOS CÍRCULOS POLÍTICOS y de la misma sociedad, se vierten, generalmente, opiniones respecto al quehacer público de los gobernantes, los cuales van desde el propio gobernador, hasta los doscientos doce alcaldes que tiene la entidad veracruzana.
Pues, precisamente, en este campo, es donde se han obtenido expresiones favorables para el alcalde de Xalapa, quien cerrará el año con más de doscientas setenta obras, tan solo en este primer año del ejercicio constitucional del poder municipal, obras que, ciertamente, se conocen ampliamente, porque se llevan a cabo en todo el municipio que le corresponde gobernar.
La inversión en Xalapa, es histórica, la cual se calcula en ciento sesenta y cinco millones de pesos, cifra que podría ser mayor, considerando que todavía le resta tiempo en este año a la administración actual. Es por eso, que las opiniones que se conocen favorecen en lo positivo al alcalde de la capital veracruzana, donde ha tenido buena calificación con respecto a los demás alcaldes veracruzanos.
Y aunque usted, no lo crea, ya en estos momentos, se está proyectando el trabajo a realizar en el próximo año, con una mayor inversión, la cual emociona al alcalde Ahued, como a toda la comuna que encabeza.
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Y EL LUNES, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.